“Invertimos mucho en las cosas pero no en las personas y Tabasco necesita una sacudida ética”. Estas ideas vertidas por el gobernador electo Arturo Núñez Jiménez, pronunciadas durante el diálogo con la mesa directiva de la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión (CIRT), delegación Tabasco, tiene una carga sociológica que merece un profundo análisis por parte de los todos los sectores organizados que gozan de cierta independencia jurídica, moral e ideológica.

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Juan José Hernández Hernández

La sociedad tabasqueña está pasando por momento críticos en tanto sus valores morales y éticos están prácticamente pulverizados, cuyas razones se encuentran débil y frágil papel, que desempeñan las instituciones como la familia, la educación, el gobierno, la iglesia y los medios de comunicación. Si el individuo de nuestra sociedad carece de valores morales y éticos desde la filosofía del derecho, entonces quiere decir que las mencionadas instituciones no están cumpliendo su papel en la sociedad.
Vemos a la familia con problemas internos y externos que contribuyen a su disfunción, vemos a la educación que propiamente raya en la alienación, vemos al gobierno cuyo ejercicio del poder está al servicio de grupos retrógradas, vemos a la iglesia carente de fundamentos sólidos en la predicación de los evangelios y vemos a los medios de comunicación promoviendo actitudes triviales que denigran el oficio del periodismo (esto último lo subraya el escritor Mario Vargas Llosa, quien dijo que hasta el sexo ha dejado de ser una actividad erótica).
Por lo tanto, lo que dijo el gobernador electo Arturo Núñez Jiménez tiene un mensaje que pocos tabasqueños pueden asimilar, dada la complejidad de sus conceptos sobre los problemas sociales que imperan en la conciencia colectiva de la nación de Tabasco, por supuesto. Cuando Núñez Jiménez dice que “invertimos mucho en las cosas pero en las personas”, es porque las personas se han convertido en robots que sólo obedecen la ideología de la propaganda de la economía de consumo que propaga el sistema capitalista imperante en el mundo. Quiere decir que los individuos se han convertido en “cosas” en una economía de consumo como la nuestra, y si el sujeto es “cosa”, entonces no tiene conciencia propia de la realidad y mucho menos pensamiento crítico. Por lo tanto lo que priva es el pensamiento mecánico. El individuo es un ser pasivo que ha perdido ética, moral, responsabilidad; ha dejado el sentido de la solidaridad con sus semejantes porque privilegia la actitud individualista.
Para revertir estos fenómenos es necesario que las instituciones recobren su verdadero papel por las cuales fueron creadas. De ahí que los medios de comunicación, como organismos que han extraviado su función social, están obligados a autoevaluarse y ejercer una sana autocritica consigo. Muchas preguntas debe hacerse: ¿en realidad los medios contribuyen a la educación de sus lectores, televidentes o radioescuchas?
Esta pérdida de valores en la sociedad, urge recobrarla. Tienen la palabra el gobierno, la iglesia, las asociaciones civiles, el sistema educativo de manera particular, pero sobre todo los medios de comunicación cuyos periodistas deben cambiar de actitud, enfocados en el análisis de los problemas sociales, políticos, económicos y ecológicos, con rigor metodológico. Sólo de esta forma contribuirán a rescatar los valores.
PLED: justicia demandada
Revertir el tejido social en que se encuentra la sociedad tabasqueña requiere de mucha visión, sensibilidad, pero sobre todo conocimiento profundo de las causas y efectos de los problemas que experimentan diversos sectores de la población tabasqueña. La elaboración del Plan Estatal de Desarrollo 20013-2018 anunciado por el gobernador electo Arturo Núñez Jiménez, representan una enorme responsabilidad histórica y ética. ¿Por qué histórica y ética? Porque el gobierno de la alternancia tiene que marcar la diferencia en relación el régimen priista que está a punto de expirar.
La Elaboración del PLED ya tiene sustento; es precisamente los 21 foros temáticos que se llevaron a cabo durante la campaña de Arturo Núñez Jiménez, donde se analizaron diversos rubros como obras públicas, educación indígena, red carretera, turismo, pesca, agricultura, ecología, sistema hidrológico, tratamientos de agua residuales, salud, educación, ciencia y tecnología, reforma política, y otros temas de vital importancia para el desarrollo de Tabasco, de tal manera que garantice equidad y justicia social, demanda muy sentida por la población local.
Los 21 equipos de trabajos que integran el PLED, serán coordinados por políticos tabasqueños que, de algún modo, conocen la raíz de los problemas que padecen los diversos sectores del Estado. En todos ellos participan políticos conocidos, pero otros son rostros nuevos. Esta es una cualidad que enriquece las mesas de trabajo. El PLED será el eje rector del gobierno de la alternancia. Será la fuerza motriz que dinamice los cambios económicos, sociales, políticos y culturales que espera y demanda la región. Tabasco tiene un rezago de más de 30 años en relación con otros Estados del país como Monterrey, Guadalajara y el Distrito Federal.
El sector empresarial se ha comprometido a trabajar hombro con hombro en la reconstrucción del nuevo Tabasco. Eso denota confianza y credibilidad que persiste en ambos lados. La clave de la buena gobernabilidad es el constante diálogo con todas las organizaciones obreras y patronales. El buen gobierno es un facilitador que requiere el sector privado para lograr objetivos específicos que contribuyan a las tareas del gobierno. En el proyecto del PLED se contemplan las observaciones hechas por el este importante sector estatal.
Lo trascendente del PLED es la participación de todos los sectores organizados que existen en Tabasco, ese es el llamado del gobernador electo, todo con miras a conformar un proyecto democrático, plural e incluyente. La alternancia como renovación moral y ético, va en serio.
Carrillo se declara ambientalista
La preservación y el respeto al medio ambiente es tema importante para todo sistema de gobierno. Y el municipal no es la excepción. El alcalde electo de Paraíso, Jorge Alberto Carrillo Jiménez, puso énfasis de que su administración que iniciará el próximo 1 de enero del 2013, tendrá como programa prioritario, la implementación de programas de desarrollo sustentable que revierte el deterioro ambiente de la zona.
Esto lo dio a conocer al participar en el conferencia “Municipios y Desarrollo Sustentable: Políticas Públicas para Alcanzarlos”, impartido por el Consejo Internacional para las Iniciativas Ambientales Locales, ICLIEI, por sus siglas en inglés. En el evento asistieron empresarios, la Canirac, canaco, fue lamentable la ausencia de los presidentes priistas electos de Balancán, Emiliano Zapata, Jonuta, Jalapa, Teapa y Tenosique, quienes fueron invitados, y no les interesó el tema de los problemas del medio ambiente ni el cambio climático. el_espiajjhh@yahoo.com.mx