Intervención
AMLO enajenado César Armando Javier Pérez cesarjavier143@hotmail.com El patriarca de Morena vuelve a ponerse en evidencia y una vez más pone en peligro su triunfo en las próximas elecciones electorales. Andrés Manuel López Obrador da señales que su discurso ha cambiado, pero en el fondo es lo mismo. Su único objetivo es ganar al precio […]
17 de febrero de 2017

AMLO enajenado

César Armando Javier Pérez
cesarjavier143@hotmail.com
El patriarca de Morena vuelve a ponerse en evidencia y una vez más pone en peligro su triunfo en las próximas elecciones electorales. Andrés Manuel López Obrador da señales que su discurso ha cambiado, pero en el fondo es lo mismo. Su único objetivo es ganar al precio que sea.

Aparte de aburrida, la entrevista que sostuvo ayer el casi tres veces candidato presidencial, corroboró lo que se le ha criticado siempre, sólo está pensando en él. No dijo nada nuevo, su odio contra todo aquel que no esté con él, está más presente que nunca, quizás un poco peor, pues ahora es él quien manda en su partido.

Como siempre, López Obrador cae en contradicciones al decir que perdona los pecados de todo aquel que proceda de otro partido. Osea, hoy eres ratero, bandido, delincuente, integrante de la tan mencionada mafia en el poder, pero si decides apoyarlo, eres bueno, arrepentido, un ángel del señor, un mártir.

Aparte de no decir nada nuevo, ni explicar cómo cumpliría todo lo que está prometiendo, Obrador continúa su eterna campaña de casi 18 años, enfocándola en sus oponentes, criticando y culpando lo que hacen priistas, panistas y ahora, sus nuevos rivales, los perredistas.

¿Quién le cree a Andrés Manuel? Aparte de Adán Augusto y demás achichincles, no sé quién más pueda tragarse el sermón eclesiástico que maneja ahora.

Luego de decir que la llegada de Donald Trump no nos debería preocupar, ahora dice que es como Hitler. Critica las ofensas que el presidente estadounidense le hizo a Enrique Peña Nieto cuando ha sido él quien ha calificado al presidente de México de achichincle, títere, mentiroso, etc.

¿Cómo se atreve a decirse patriota, cuando él mismo ha criticado a todas las instituciones públicas de éste país? Basta recordar que calificó de corruptos a la Cámara de Diputados, al Senado, a la Suprema Corte de Justicia de la Nación y al INE, ese cuestionado y según él, corrupto instituto que ahora es santo porque ya le da dinero.

AMLO actúa como “Los tres García”, avala y encabeza las ofensas y el descrédito interno, pero cuando algún foráneo, en este caso Trump, ofende al país, brinca peor que vieja placera. ¿Cómo se atreve a pedir respeto cuando ha sido el primero en descalificar y acusar sin pruebas y desconocer a todas las instituciones nacionales?

Pero volvámonos creyentes. Imaginemos que López Obrador sí cambió, ya no es aquél visceral de antaño. Creamos que las amargas experiencias han hecho que el oriundo de Tepetitán haya tomado otro rumbo y ahora sí piensa en el beneficio del país, démosle el beneficio de la duda, realmente muchas personas quieren y esperan que esta vez sí gane, y en caso de ganar, debe cumplir las mil promesas que ha hecho a lo largo de tres sexenios.

¿Qué más nos puede pasar? Ya se le dio oportunidad al PAN y nada, regresamos al PRI con el “guapo”, y resultó peor, ¿por qué no darle chance al “Peje”?

Ah!, pero eso sí, Obrador está obligado moralmente a cumplir sus dichos, a demostrar que el llamado de unidad al que convoca ahora sea en verdad por el bien del país y, en especial del estado. Está obligado a restregarle a sus detractores que no es un peligro para el país, que en verdad le interesa el pueblo, de lo contrario tendrá que aguantar a un pueblo desesperado que ve en él la única esperanza de salir del “despeñadero”.

Que no le extrañen protestas extremas, a como él le enseñó a la gente, pues como dice el dicho “buen cobrador, mal pagador” y en eso podría caer AMLO, exige desarrollo, ahorro de recursos, cero corrupción y puede caer en lo mismo o peor. Ya sabemos que el poder enloquece y Obrador y sus seguidores están ansiosos de poder.

De no cumplir, las protestas no serán como son ahora, serían peor. Es su escuela, pero realmente esperemos que de ganar, López Obrador le cumpla a éste sufrido pueblo, no nos merecemos más crisis, más inseguridad y nulo desarrollo, sobretodo el sureste mexicano, que ve en AMLO la oportunidad de dejar de ser ignorado. Aprovechemos la avalancha religiosa que abandera ahora el líder de Morena y recemos para que, de ganar, el tabasqueño cumpla, por lo menos un poco de lo que tanto ha prometido.

A nivel local esperamos lo mismo, el efecto AMLO puede llevar al triunfo a quien sea candidato de Morena, y de ser así tendrán que cumplir con las expectativas y demostrar que, como dice Obrador, no son sólo chachalacas…

Compartir: