Buena fama pública
José David Sánchez Plaza sanpladave1959@hotmail.com Una persona en la vida va formando una imagen ante la sociedad, dependiendo del comportamiento que tenga, será la opinión que las personas tienen de ella. Durante su vida, muchas personas cuidan lo que se diga o se opine de ellas, sobre todos si son personas públicas, y por eso […]
27 de mayo de 2014

José David Sánchez Plaza
sanpladave1959@hotmail.com
Una persona en la vida va formando una imagen ante la sociedad, dependiendo del comportamiento que tenga, será la opinión que las personas tienen de ella.

Durante su vida, muchas personas cuidan lo que se diga o se opine de ellas, sobre todos si son personas públicas, y por eso tratan de tener y demostrar que realmente son lo que las personas piensan de ellas. O sea cuidan su imagen pública.

Hay personas que comentan que no les preocupa lo que la gente dice porque sostienen que esas personas “no les dan de comer”, dirían “no vivo de lo que piensen o digan los demás”.

Hay personas que durante muchos años se han preocupado y ocupado de mantener una buena imagen ante la sociedad, y así la han mantenido hasta que mueren.

Por ahora, está a discusión si los actuales consejeros electorales del IEPC, deben mantenerse en el cargo o deben de ser cambiados como lo marca la nueva reforma político electoral.

Hace algunos días comentaban algunos conocidos que muchos de los que han llegado a ocupar el cargo de consejero electoral del IEPCha sido muy mal para su imagen y fama pública. Casos hay muchos y muy notorios.

Uno de ellos, fue del ex presidente del IEPC, Enrique Galán Márquez, hasta antes de que llegará a la presidencia de ese organismo, gozó y tuvo una buena imagen y fama pública, pero eso fue antes que aceptara dicho nombramiento.

Galán Márquez incluso en el lapso que se desempeñó como consejero local del IFE, gozó y tuvo buena fama pública. El haber llegado a la presidencia del IEPC le afectó en su imagen y su fama pública.

Martín Rueda de León, fue otro de los ex presidentes que no le fue muy bien en su imagen y fama pública, su excompañero, Carlos Aguilar, lo acusó de manera permanente de manejar al organismo electoral “como su rancho”.

Por ahora, está a discusión, el desempeño y actuación de los últimos tres presidentes del IEPC, Alfonso Castillo Suárez, hijo de la presidenta del Instituto de Transparencia y Acceso a la Información, Felicitas Suárez Castro; Gustavo Rodríguez Castro, actual consejero electoral y Rosendo Gómez Piedra, que ocupa la presidencia de ese organismo.

Como se sabe, los tres han sido involucrados, en la presunta compra irregular del edificio, en donde sería la sede del órgano electoral y por lo que se tiene una denuncia ante la Procuraduría General de Justicia y un informe en el Congreso local, en donde la Comisión de Justicia y Gran Jurado, deberá de dictaminar al respecto.

Tiene tiempo que Alfonso Castillo Suárez, ex presidente del IEPC no ha dado la cara ante la opinión pública, el último cargo que se supo que ocupó, fue en la Universidad Tecnológica de Tabasco, al cual renunció, y desde entonces, se desconoce su paradero.

El consejero electoral, Ignacio Rodríguez Castro, la semana pasada, se presentó en la Procuraduría General de Justicia a declarar como testigo por la presunta compra irregular del edificio.

El hasta ahora presidente, Rosendo Gómez Piedra, siempre se ha deslindado de haber participado en la presunta compra irregular del edificio y sostiene que no cometió ninguna irregularidad.

Pero ¿los actuales consejeros electorales son garantía de transparencia y claridad para organizar la elección del 2015?; ¿tienen la calidad moral y buena fama pública para seguir en el cargo?.

El PRD ha insistido que se deben hacer un cambio porque los consejeros electorales no son garantía de transparencia, claridad e imparcialidad para el proceso del 2015.

La reforma electoral que deberá de aprobar la Cámara de Diputados local, determinará los mecanismos que se deberán de utilizar para el nombramiento de los próximos consejeros electorales.  Ahí se determinará la permanencia o salida de los que actualmente ocupan el cargo.

Lo sobresaliente
Siguen los cuestionamientos en contra de la directora del Instituto Estatal de la Mujer, Leticia Romero Oropeza por las horas que ocupa en los trabajos que desempeña, aunque ahora la presidenta de la Junta de Coordinación Política, Neyda García, dice que ella dedica 20 horas para atender cada uno de los asuntos en la Cámara de Diputados.

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