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Pobreza y riqueza Luis A. Pampillón Ponce pampillon_p@hotmail.com Hace dos semanas, platicábamos en este espacio a cerca de la pobreza y la desigualdad. Aunque los analistas económicos no alcanzan a ponerse de acuerdo en el número de pobres en el país, lo cierto es que nadie niega su presencia y crecimiento. Crece y se extiende […]
11 de agosto de 2015

Pobreza y riqueza

Luis A. Pampillón Ponce
pampillon_p@hotmail.com
Hace dos semanas, platicábamos en este espacio a cerca de la pobreza y la desigualdad. Aunque los analistas económicos no alcanzan a ponerse de acuerdo en el número de pobres en el país, lo cierto es que nadie niega su presencia y crecimiento.

Crece y se extiende la pobreza y la desigualdad a lo largo y ancho del país. Pero también, a lo largo y ancho del país se acumulan riquezas mal habidas o no muy claras que se diga. Veamos algunos datos.

Un exclusivo grupo de 221 mil 825 grandes inversionistas concentra un monto de recursos en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) equivalente a 45.9 por ciento del tamaño de la economía. Informes de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) precisan que al cierre del primer trimestre de este año, el monto de los recursos de inversionistas en el mercado accionario alcanzó 8 billones 489 mil 700 millones de pesos, cantidad que representa un crecimiento anual de 4.6 por ciento. (La jornada, 9 de agosto de 2015).

El exclusivo grupo de “inversionistas” equivale a 0.19 por ciento de la población total de México, estimada en este año de 120 millones de habitantes.

Por su parte, los banqueros ganaron 54 mil millones de pesos en el primer semestre del año. Veamos:

“Las utilidades de los bancos comerciales que operan en México ascendieron a 54 mil millones de pesos en el primer semestre de 2015, cantidad 13.8 por ciento superior a las ganancias obtenidas en el mismo periodo de 2014, según cifras del estado de resultados de la banca dados a conocer por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores. (La jornada, 5 de agosto de 2015).

Si, leyó usted bien: 54 mil millones de pesos en un semestre; es decir, 9 mil millones de pesos al mes o, si se quiere, 300 millones de pesos cada día hábil e inhábil.

Esos son los resultados de una banca que siendo de los mexicanos fue entregada por Carlos Salinas de Gortari a sus amigos que luego se asociaron o vendieron a inversionistas extranjeros que, como vemos, se están llevando la tajada del león en un país lleno de pobres y de jóvenes sin perspectivas de crecimiento.

En México al menos 1.3 millones de jóvenes de 15 a 24 años laboran sin remuneración alguna. Otros 154 mil no tienen actividad identificable, y 24 mil más se dedican a dar servicios gratuitos a la comunidad, apoyar en la construcción y mantenimiento de la vivienda, y a realizar compras, trámites o traslados de familiares, señala el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en su Panorámica de la población joven en México desde la perspectiva de su condición de actividad 2013-2014. (La jornada 9 de agosto de 2015)

El documento agrega que en el país hay 21.5 millones de personas entre 15 y 24 años. Tienen un promedio de 10 años de escolaridad, y al menos 10.3 millones (48.1 por ciento) acuden a la escuela. Cifra que sube a casi ocho de cada 10 para quienes tienen entre 15 y 17 años, pero desciende a menos de 40 por ciento para quienes tienen entre 18 y 24 años.

En cuanto a su inserción en el mercado laboral, 10 millones están considerados población económicamente activa. De ellos, 9.1 millones tienen un empleo y 923 mil lo buscan.

Pero el capital trasnacional no solamente se ha adueñado de los bancos, empresas e industrias nacionales, sino también, cada vez más, de amplios segmentos de tierra

En menos de tres años, personas de Costa Rica y Colombia, quienes se identifican como inversionistas, han comprado a ejidatarios más de 130 mil hectáreas de selva en Campeche y Tabasco para la siembra de palma de aceite, caña de azúcar y jatropha, y para el cultivo de hule. (La jornada, 5 de agosto de 2015)

Mientras, en Chihuahua, Hidalgo, Zacatecas, Jalisco, Morelos y Puebla, entre otros estados, empresas y autoridades federales y estatales presionan a los campesinos para que aprueben proyectos mineros, eólicos, hidroeléctricos y presas, denunció José Jacobo Femat, dirigente de la Central de Organizaciones Campesinas y Populares (Cocyp).

Refirió que en Chiapas los lacandones son coaccionados para que cedan sus derechos sobre Montes Azules a asociaciones civiles, que aliadas con trasnacionales pretenden explotar la zona.

Tales acciones contra las comunidades indígenas serán expuestas en el encuentro Los pueblos indígenas de México, raíz cultural de la nación, que se llevará a cabo este fin de semana en Papantla, Veracruz, donde también se abordarán los temas: cambio climático; erosión de los suelos; crecimiento urbano; reconversión del uso del suelo; empresas mineras, petroleras y gaseras, entre otras, y el papel del Estado.

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