Buscan agenda para transformar el partido, pero no se ponen de acuerdo sobre las movilizaciones sociales que han caracterizado al partido

Ciudad de México
Notimex
Las corrientes internas del Partido de la Revolución Democrática (PRD) coincidieron en transformar al instituto político para adecuarlo a las nuevas circunstancias que vive el país, aunque difirieron en el método para hacerlo. La mayoría de las corrientes consideraron que ese cambio implica hacer a un lado cualquier forma de “lucha no pacífica”, mientras que el líder de Izquierda Democrática Nacional, René Bejarano, defendió la movilización social como método para lograr un fin.
El coordinador de la corriente Nueva Izquierda, Jesús Ortega, señaló que dados los momentos que vive el país y el partido, hay que tomar decisiones de carácter transcendental de cara al Congreso Nacional del PRD, que se celebrará en diciembre próximo.
Por ello, “o se aprovecha la oportunidad y se cambia o se deja pasar ésta y nos seguimos hundiendo en la desgastante rutina de la sola sobrevivencia, ya que momentos como estos no se repiten”, dijo Ortega durante la inauguración del Congreso Nacional de Nueva Izquierda.
Ante miembros de Nueva Izquierda y líderes del resto de corrientes perredistas, expuso que si en la mayoría hay voluntad genuina de cambiar es necesario terminar la dualidad de comportamientos y “abrir nuestra mente para terminar con un pasado que ha dejado traumas”.
Resaltó que “a pesar de que la Declaración de Principios del PRD nos mandata respetar la ley, no pocos compañeros asumen un comportamiento al margen de ese principio y deciden de forma arbitraria que se respeta y que no”.
De ahí que, resaltó, una izquierda democrática no acepta ninguna forma de lucha que no sea pacífica, por lo que es necesario desechar la idea de que en algunas circunstancias es válida la violencia para conseguir determinados objetivos de justicia.
El jurista y ex militante priista, Agustín Basave, expuso que los electores mexicanos quieren escuchar más propuestas que protestas, por lo que el PRD debe hacer a un lado la estrategia de que para llegar al gobierno se debe privilegiar la movilización social.
Agregó que a diferencia de lo que ocurre en otros partidos de izquierda del orbe, en México la izquierda radical y la moderada cohabitan en el PRD, y sus diferencias no están en sus programas de gobierno sino en la estrategia y prácticas para llegar al poder.
Consideró que si en 2006 Andrés Manuel López Obrador no hubiera recurrido a la radicalización electoral, nada habría impedido que el tabasqueño ganara la elección presidencial en julio pasado.
A su vez, el líder de Izquierda Democrática Nacional, René Bejarano, dijo que “se debe construir sin esquematismos ni visiones maniqueas una propuesta única que nos coloque en condiciones de preservar la unidad”.
En su oportunidad, el presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano, dijo que este Congreso marca el inicio del debate rumbo al Congreso Nacional del PRD, el cual se celebrará del 14 al 16 de diciembre próximo.
En su oportunidad, el presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano, dijo que este Congreso marca el inicio del debate rumbo al Congreso Nacional del PRD, el cual se celebrará del 14 al 16 de diciembre próximo.
Agregó que el importante crecimiento que ha registrado el PRD obliga al partido a renovarse, porque más allá de ubicar una crisis negativa hay el dilema de “o logramos generar las condiciones para dar un paso adelante, o regresamos a los esquemas de la marginalidad político-electoral”.
Finalmente, advirtió que este reto se acrecentó con la salida de Andrés Manuel López Obrador y su anuncio de iniciar la conformación de un nuevo partido, con el que “con toda seguridad competiremos en 2015”