La sucesión de Núñez

En ese entonces, todos los aspirantes tenían que andar haciendo méritos para ganarse la conciencia del príncipe, y ahora ya no es la conciencia del príncipe, es el voto de la gente. Arturo Núñez Jiménez/ Rumbo Nuevo 131116

Erwin Macario
erwinmacario@hotmail.com
A don Arturo Núñez se lo dijo un estratega de la política, don Fernando Gutiérrez Barrio, y así lo repitió a Rumbo Nuevo, en la víspera de su cuarto informe de Gobierno: “Mira, Arturo, la sucesión presidencial en México se decide en la conciencia del Príncipe”.

Pero el gobernador de Tabasco ha visto contar muchos votos desde entonces. Y por eso, en esa entrevista en la que acompañaron a este reportero los columnistas Fernando Hernández Gómez y Jorge Núñez Martín, mencionó que él sería garante del piso parejo en las elecciones del 2018.

Ya no es, como antes, cuando él mismo militaba en el PRI, que los príncipes dejaban herederos. Lo que a nosotros nos toca, es que haya haya piso parejo para todos y el pleno ejercicio de los derechos políticos de los ciudadanos que son los que van a decidir —dejó claro desde entonces.

Lo que Tabasco ha vivido estos tiempos lo han probado. Se dijo que los dados estaban cargados, que el delfín de Núñez era José Antonio de la Vega Asmitia. Y ya ven que no. Incluso el columnista no olvida que Arturo dijo entonces que tenía varios gallos para el 18.

Ayer jueves 15, lo reiteró: Yo quiero primero que nada, porque es un ordenamiento constitucional y legal, es un mandato jurídico; en segundo, por convicción personal propia; en tercero, por mi propia trayectoria que me vinculó más de dos décadas a la construcción de la institucionalidad electoral del país, y mi condición de demócrata irredento de que al frente del Gobierno del Estado, como lo he hecho al interior de mi propio partido, seré garante de piso parejo en lo que toca a los recursos, a todo lo que es responsabilidad del Gobierno del Estado.

El gobernador, que deberá garantizar la limpieza electoral, fue invitado a participar, como testigo de honor, en la concreción del Convenio Marco de Colaboración para la Jornada Electoral 2018, entre el Instituto Nacional Electoral y la Secretaría de Educación Pública del Gobierno de Tabasco. Buen momento para reiterar el piso parejo, ya no a los aspirantes de su partido, el PRD, sino a todos los candidatos que estarán en las boletas este 2018.

Los del convenio con Educación porque a través del cumplimiento de ese documento se brindarán todas las facilidades a las autoridades electorales para que inicien el proceso de verificación de las condiciones de las escuelas donde se instalarán casillas para la jornada electoral del domingo 1 de julio.

“Hacía yo cuentas que el hoy INE, antes IFE, va a sumar, con los comicios de este año, su décima elección organizada. Hay una experiencia acumulada que ha ido permitiendo mejorar los mecanismos, los procedimientos que se diseñaron para relegitimar el sistema electoral mexicano, después de la grave crisis que padeció a partir de la elección de 1988 y, evidentemente, entiendo que es la primera vez que se formaliza un convenio de ese tipo, de una tarea que por prácticas se venía haciendo desde hace mucho tiempo, que es el apoyo de las autoridades educativas para poner a disposición de las autoridades electorales instalaciones en todo el territorio, en este caso del estado de Tabasco, que puedan ser útiles para la celebración de la jornada comicial, para instalar las mesas receptoras de casilla, para poder alojar ahí a las filas de votantes que deberán emitir su sufragio el día de la jornada comicial”, explicó Núñez Jiménez.

Y respecto a su papel en el proceso electoral ha “volvido” a ofrece imparcialidad al señalar que: “Mi gobierno no será de ningún modo un actor más en la contienda; los competidores serán los candidatos de los partidos políticos, y entre ellos la ciudadanía tendrá que optar por quien sea la opción de su preferencia”.

Recordó en ese acto, ayer, que cuando fue director del IFE, eran 55 millones. Ha crecido mucho la ciudadanía del 94 a la fecha, y pues hoy, en virtud del proceso político que vivió el país, por razones de las peculiaridades de nuestro desarrollo político, del desenvolvimiento de un partido hegemónico, hubo necesidad de crear instituciones electorales que no se parezcan a las instituciones de ningún otro país.

Político, de teoría y práctica, a Núñez no sólo le ha tocado llevar la alternancia al gobierno de Tabasco y mantenerla en tanto llega la transicción política, somp que ha tenido que caminar senderos distintos a la práctica política tradicional. Le ha funcionado el librito en el que apoertaron gente como Gutiérrez Barrios, pero también le ha servido innovar.

Casi un político anti Príncipe, anti Maquiavelo, ha tenido que pasar encima de las recomendaciones que éste da en política. Las circunstancias le han obligado.

Pero no renuncia al papel democrático que le toca este 2018. Con el piso parejo.