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Linaje político Y el día de hoy, tenemos a nuestro querido estado amenazado por la más grave de las enfermedades: el desánimo, la frustración y la sensación de que no hay manera de cambiar, porque todo es más de lo mismo. Gina Trujillo 070118 Erwin Macario erwinmacario@hotmail.com En lo que pudiera parecer un reconocimiento al […]
8 de enero de 2018

Linaje político

Y el día de hoy, tenemos a nuestro
querido estado amenazado por la más
grave de las enfermedades: el desánimo,
la frustración y la sensación de que no hay
manera de cambiar, porque todo es más
de lo mismo. Gina Trujillo 070118

Erwin Macario
erwinmacario@hotmail.com
En lo que pudiera parecer un reconocimiento al poder del linaje en política, un mensaje contra el presunto candidato del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Adán Augusto López Hernández, y un guiño a Gerardo Gaudiano Rovirosa, seguro candidato del PRD a la gubernatura de Tabasco, la precandidata del PRI, Gina Trujillo arrancó ayer domingo, en Tenosique, su precampaña para suceder al gobernador Arturo Núñez Jiménez.

La hija del gobernador Mario Trujillo García, (1971-1976), quien llegó al Palacio de Gobierno de Tabasco y a la Quinta Grijalva (residencia oficial de los gobernantes tabasqueños) al morir en plena campaña el candidato Agapito Domínguez Canabal, se destapó como sobrina nieta de José María Pino Suárez, cuyo nombre honra la ciudad donde inició la búsqueda de la gubernatura, y también aseguró ser descendiente del poeta Arcadio Zentella Priego, uno de los defensores de la causa de Benito Juárez contra el imperio de Maximiliano.

Así lo dijo, elogiando la lealtad, Gina Trujillo ante mis paisanos: “Se demuestra como lo hizo mi tío abuelo, José María Pino Suárez, quien ante la traición de Huerta, no respondió como lo harían muchos el día de hoy, cuidando sus intereses, su respuesta, fue la de un hombre de honor, de un hombre dignísimo que en el fondo; como mi otro ancestro, Arcadio Zentella, era un poeta; por eso firmó su historia con su propia muerte, con un poema a la Lealtad!”.

Mencionar el abolengo en política, al arranque de su precampaña, es un intento de montar su futuro en sus antepasados. Los apellidos, en Tabasco, se han repetido en el gobierno, al grado que hay analistas políticos que mencionan que menos de una docena de familias han gobernado esta entidad del sureste mexicano. El más reciente caso fue el de Roberto Madrazo Pintado, quien gobernó de 1995 al 2000, con un interinato de un año de Víctor Manuel Barceló Rodríguez. Roberto se montó en el cadáver de su padre don Carlos a Madrazo Pintado (1959-1964).

Gina Trujillo busca incluir, por tercera ocasión, en la historia la repetición de su apellido paterno en la gubernatura, pues además de su padre Mario Trujillo, antes había gobernador su tío abuelo Francisco Trujillo Gurría (1939-1942), el penúltimo gobernador de cuatro años, a quien no mencionó como ancestro.

Si bien aseguró que el linaje no la mueve, Gina Trujillo citó a su padre —sin mencionar su nombre— al arranque de lo que ya es prácticamente su campaña al Gobierno Tabasco: “Pretendo seguir viviendo como pienso y alejarme de las enfermedades crónicas de nuestro estado. Con ello refrendo también la enorme satisfacción de seguir los pasos de la gente honrada, valiente, firme y en defensa de las instituciones como lo hizo mi padre en el Gobierno estatal”, dijo.

Quizá intentó corregir: “El linaje no me mueve; apuesto a los valores heredados por él, mi padre, y por aquellos valores que han heredado cada uno de los aquí presentes. Porque aquí, todos tenemos valores y hay que levantar la mirada y el pecho para decírselo a Tabasco, a México y al mundo entero”.

Sin embargo las palabras ya estaban. Un guiño a otro aspirante a renovar el linaje político, Gerardo Gaudiano Rovirosa, nieto del gobernador Leandro Rovirosa Wade (1977-1982), en cuyo periodo gubernamental nació, en la propia casa de gobierno, el hoy joven aspirante a la sucesión de este año en Tabasco. El único aspirante nacido en la Quyinta Grijalva, como lo dice la propia actya de nacimiento.

Y una censura, mencionar linajes, a quien se considera, dentro de la nobleza política, un plebeyo: el virtual candidato del partido de Andrés Manuel López Obrador, Morena, Adán Augusto López Hernández, gente sin ancestros gobernantes.

Sin mencionar lapsos de gobiernos, la aspirante fuerte con partido débil, denunció el saqueo que ha sufrido Tabasco. Se entiende después del gobierno de su padre Mario Trujillo: ”Nuestro estado ha sido saqueado y vulnerado. Nuestro estado ha sido abandonado en su seguridad, pero sobre todo, ha sido abandonado a la suerte de los vivales individuales, de quienes desde el gobierno, en vez de abocarse a la construcción colectiva de un proyecto que signifique bienestar para todos, buscan sólo el bienestar de sus bolsillos”.

Pudieran repartirse culpas y, así golpear. Después de don Mario han gobernado Tabasco Leandro Rovirosa Wade, Enrique González Pedrero, Salvador Neme Castillo, Roberto Madrazo Pintado, Manuel Andrade Díaz, Andrés Granier Melo y el actual gobernante Arturo Núñez Jiménez; y los gobiernos sustitutos José María Peralta López y Manuel Gurría Ordóñez , el interinato de Víctor Manuel Barceló y el gobierno de un año de Enrique Priego Oropeza.

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