El tren del sexenio

En el marco de la política democrática,
y especialmente en el ejercicio de un
gobierno responsable, no debe haber
espacio para la improvisación ni para
la simulación burocrática. Arturo Núñez
Jiménez 270613

Erwin Macario
erwinmacario@hotmail.com
Con un desastre económico heredado, que el propio gobernador Arturo Núñez estimó –al presentar su Plan Estatal de Desarrollo— que “dejó al 57% de la población en situación de pobreza y con altas tasas de desempleo y endeudamiento público”, la locomotora había descarrilado y estaba a punto de caer al vacío de la historia.

Detenerla, frenar su vertiginosa carrera al precipicio y colocarla de nuevo en, las vías del desarrollo, ha sido la tarea más difícil a que puede enfrentarse un hombre, por más experimentado que sea, pero ayer miércoles –en un acto similar a aquel del recuento y la esperanza, cuando se empezaba “a revertir el deterioro”—, los tabasqueños sintieron que ese tren va en la vía correcta, camina. Claro en los tiempos y circunstancias actuales, agravados por el crecimiento natural de la descomposición heredada y el mal manejo de la política petrolera.

Arturo Núñez Jiménez acudió, en el Teatro Universitario, a la presentación del Plan Municipal de Desarrollo 2016-2018 de la comuna de Centro. Ahí reconoció que los cinco ejes rectores que componen el instrumento de planeación democrática, presentado por el alcalde Gerardo Gaudiano Rovirosa, son coincidentes con los objetivos del Plan Estatal de Desarrollo 2013-2018 y privilegian, como referente obligado, la coordinación entre los tres órdenes de gobierno.

Los ejes de la planeación democrática que resulta de la voz ciudadana recogida en campaña por el joven alcalde Gaudiano Rovirosa se relacionan con un gobierno efectivo, desarrollo social incluyente, desarrollo económico sostenido, ordenamiento territorial y desarrollo ambiental sustentable, y municipio fuerte y protegido.

Ofreció Gerardo Gaudiano un ejercicio de gobierno municipal con un presupuesto basado en resultados que atiendan el diálogo, los acuerdos y los consensos, instrumentos que darán cauce a las exigencias de la gente.

Como hace tres años, cuando Núñez esbozó la tarea en la que pondría su empeño, en la culminación de un ciclo de formulación de propuestas y de planeación, documentando el inicio de un período de trabajo “que dará certeza a nuestros empeños y claridad a nuestros propósitos”, Gerardo Gaudiano puso ayer nuevo combustible a una máquina que durante más de 80 años había sido trabajada, sin el mantenimiento adecuado.

La presencia, en el evento de ayer, de los representantes de los sectores políticos, económicos y sociales de Tabasco, asentados en el municipio de Centro, dan certeza que pese a lo rudo del camino , a los escollos que ha enfrentado la marcha de la locomotora del progreso, el propio Plan Estatal de Núñez ha sido una auténtica guía para la acción transformadora de Tabasco. Como él lo dijo: “Es, para comenzar, un espejo en el que podemos ver el rostro y los intereses legítimos de la sociedad tabasqueña, de sus distintos grupos y organizaciones sociales, de sus sectores productivos e instituciones académicas; de los trabajadores del campo y la ciudad, de los expertos y los líderes comunitarios”.

Y eso mismo se vio en la presentación del Plan Municipal de Desarrollo de Centro, uno de los instrumentos que con el Plan Estatal buscará la participación social, la consulta pública, la transparencia y la responsabilidad en el ejercicio del gobierno, como valores irrenunciables de un desarrollo equitativo sustentado en la nueva cultura política que ha impulsado Arturo Núñez, aun en contra de lo difícil que ha sido este sexenio.

Cuando se está a la mitad del río, es sabido, no se puede cambiar cabalgadura. Los planes municipales de desarrollo que el propio gobernador Núñez ha impulsado en Tabasco tienen que aplicarse a la realidad tabasqueña. Sin improvisar y ni simular. Conforme a la realidad.

Como está documentado en su propio discurso: El esfuerzo estatal de planeación ha cuidado especialmente la relación con las estrategias del propio Plan Nacional de Desarrollo propuesto a todos los mexicanos por el Presidente de la República, licenciado Enrique Peña Nieto. Por supuesto dicho esfuerzo se complementa con lo que se ha venido trabajando en los planes a nivel municipal a partir de las especificidades locales”.

La locomotora está en marcha, con parada en la estación 2018. Pero contra lo que pregonan los eternos enemigos de Tabasco no se le puede forzar a velocidades altas. Está en las vías correctas, con el rumbo correcto. Esa máquina está siendo aceitada de nuevo, pues se le había trabajado sin el mantenimiento necesario. Arturo Núñez, y en este caso de hoy, Gerardo Gaudiano, la llevarán a la estación esperada.