¡Vaya!, descaro de Transportistas locales

María Elena Villarreal Vásquez
editvillarrealv@yahoo.com.mx
En la más grande desfachatez, el dirigente del corredor Universidad-Bicentenario, José Luis Montoya López, amaga con movilizaciones en caso de que no se les pague al cien por ciento el subsidio que el gobierno del estado les otorga con recursos del pueblo, cuando estos individuos, se han quedado en la hamaca a extender la mano por un servicio que no están prestando a los usuarios.

La mejor prueba es la que cualquier ciudadano puede constatar cuando en esta ruta como en la de 27 de Febrero y Méndez, merced a las gestiones y estrategias implementadas por el actual titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, José Avram López Cámara Zurita, quien a fin de cubrir la demanda ciudadana, implementó el servicio con unidades procedentes de los municipios y así evitar contratiempos y gastos excesivos a los usuarios de esa ruta, la de Universidad –Bicentenario, principalmente de estudiantes, a los que por cierto, en las unidades de Transbus, nunca les respetaron el descuento con credencial.

Los señores, que se dicen transportistas y que no deben olvidar que son con-ce-sio-na-rios de un servicio público y no propietarios de este, que no pudieron hacer nada por reponer las más de 100 unidades siniestradas y ellos sabrán por qué, pero que además muchas de estas unidades no contaban con el seguro correspondiente y que cuando tenían algún percance, para salir del brete, hacían pasar las pocas unidades que sí cumplían con esta obligación, por las que había tenido el contratiempo automovilístico.

Y es que la medida anunciada el sub secretario Patricio Bosch, de pagar en forma proporcional el subsidio y sólo por aquellas unidades que estén en activo y no al cien por ciento, está dentro de toda legalidad, en lo correcto. Y no como pretende el sedicente dirigente de esta agrupación, José Luis Montoya, que vieron bien no ocuparse por mover los seguros de las unidades para reponer las siniestradas, sino que se quedaron cómodamente a ver qué cachaban y al final cobrar sin mover ni una pestaña.

Nicolás Bellizzia Aboaf
con fundamentos jurídicos
Una muy fundamentada iniciativa con proyecto de decreto presentó el diputado del PRI, Nicolás Carlos Bellizia Aboaf en relación a un problema que desde hace ya varios trienios padecemos los habitantes del municipio de Centro y que tiene que ver con el servicio de agua potable, derecho fundamental de cualquier humano y obligación primordial de toda administración llámese como se llame y que aun cuando se han querido desatender de ella, resultaría incongruente y entonces, dejarían de funcionar y ser necesarias como autoridades. Bellizia Aboaf hizo una amplia exposición de motivos fundamentadas principalmente en nuestra Carta Magna y en los Derechos Humanos con los que se estarían modificando artículos del código penal local y con los que se le impondrían de tres a cinco año de prisión y de 100 a 300 días de multa, con la consiguiente destitución e inhabilitación por el tiempo que dure la sanción, a quien por razón de su encargo, con obligación legal, no supervise, realice y ejecute el proceso de desinfección y potabilización del agua para el consumo humano. La misma disposición se aplicará a quienes distribuyan agua potable o purificada a través de pipas, garrafón o cualquier otro tipo de envase, sin los permisos y potabilización correspondientes. Además, mediante esta iniciativa, se pretende imponer de tres a cinco años de prisión y de 50 a 300 días de multa al que sin causa justificada impida o restrinja de cualquier forma el flujo del agua destinada al consumo humano. De esto último, ¡aguas! Ayuntamientos, esto es algo sancionado fuertemente en el código sanitario federal.

Colofón
Qué mal se vió la senadora del Partido Morena, Mónica Fernández Balboa entrevistada ayer por la vía telefónica en “Telerreporaje” al hablar de la despenalización del uso de la mariguana, sin una opinión propia, como el que manifiesta “opino lo mismo que dijo aquel”, o como cuando se dice “vamos para donde va Vicente”. Qué conveniente y qué cómodo. También la política del “laissez faire, laissez passer”, dejar hacer y dejar pasar, tiene sus inconveniencias y sus costos no sólo políticos…¡Vaya!, hasta que por fin, una de cal por tantas de arena en el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Tabasco (IEPCT), y es que el consejero electoral Juan Correa López propuso no invertir más en el edificio de esa institución ubicado en el periférico Carlos Pellicer Cámara, sino que mejor se ponga en venta para proyectar uno nuevo. Lo mejor que pueden hacer, les va a salir más barato…Agradecemos el favor de su lectura y les esperamos P.D. el sábado próximo.