María Elena Villarreal Vásquez
Los desplazados de
Chiapas hacia el
país de Guatemala
Preocupa lo que acontece a varios centenares de compatriotas, del vecino estado de Chiapas, que determinaron por cuestiones de seguridad, desplazarse hacia el fronterizo país de Guatemala, en donde han sido recibidos en forma solidaria, con empatía y con todo el apoyo necesario no solo en lo referente a la ayuda humanitaria y consulares, sino principalmente con el de resguardo por elementos militares, lo que es seguro les permite un respiro ante la creciente violencia e inseguridad que sufrían en su comunidad de origen.
Este asunto que pese a lo que oficialmente se diga y a la atención de la cancillería mexicana que hasta ahora –porque esta situación que vivían, se menciona se viene registrando desde hace más de un par de años-, se les pueda dar a nuestros connacionales, de ninguna manera se puede minimizar, cuando se ha visto lo que sucede en otras partes del mundo, de miles de desplazados por guerras, por conflictos internos, es decir forzados, como sucedió y sucede en Sudán, en Ucrania, en Palestina o desplazamientos por cuestiones de índole de cambios climáticos.
La cuestión es que lo que no se quería ver y aceptar, ahí está con este grupo de personas de las comunidades indígenas de Chiapas, a quienes no les quedó más que cruzar por sus propios medios hacia el municipio de Cuilco del departamento de Huehuetenango, pero si revisamos, hay que ver cuántas familias, de otras entidades, incluida la nuestra, con suficientes recursos económicos, debido a la inseguridad que prevalece en el país, han decidido migrar hacia otras naciones.
En este caso concreto, vemos que, en forma masiva, por primera vez, mexicanos deciden abandonar el suelo mexicano, mientras que de Centro y Sudamérica, otros vienen hacia nuestro país en busca de mejores oportunidades de vida. Ahí está como mejor prueba la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), pero, y ahora qué pasa con nuestros propios compatriotas.
Los hechos insólitos e inusuales no se pueden negar, ni mucho menos justificar sólo porque esta comunidad está pegada a la franja fronteriza, o porque se trata de un grupo de la comunidad rural atrapada en medio de la inseguridad, a los que el gobierno de Guatemala, tras su arribo, ha determinado apoyar no sólo con alojamiento, alimentación sino incluido visas humanitarias, con posibilidades de prórroga, hasta en tanto se resuelve su situación, de las que por cierto, la gobernadora del Huehuetenango, Elsa Hernández, lamentó que el gobierno mexicano no esté protegiendo a los connacionales, lo que hay que subrayar, por derecho les corresponde. ¿Hasta cuándo?
Colofón
Lo de la elección presidencial en Venezuela, en donde el lunático de Nicolás Maduro se declaró como triunfador, es cosa de no creerse, digno de todo un dictador que además tiene de rehén a su propio país, cuando si las cosas hubiesen estado limpias y legales, se hubiese permitido el ingreso a esa nación, a los observadores internacionales. Claro, los primeros en reconocer su triunfo, fueron los sátrapas comunistoides, los de su misma calaña, ya sabemos quiénes…Muchas verdades salieron a relucir con lo del evento ahora denominado “Fiesta del Queso” que mejor debe quedarse en eso, y no en indicar el número de edición que bien sabemos se ha venido realizando con otra denominación, es decir, la de Festival. Lástima, porque sí, el evento ha significado una importante derrama económica para la entidad y productores dedicados a esta actividad…Agradecemos su atenta lectura, y les esperamos P.D. el próximo jueves.