Armando Tosca, Coordinador de Soluciones de Vivienda, aseguró que en los últimos tres años en total ejercieron 28 millones 500 mil pesos, realizando un total de 628 acciones de viviendas
Daniel Lorca
Rumbo Nuevo
La Conavi junto con Fonhapo son unos grandes dispersores de subsidios federales para la vivienda a nivel nacional, por lo que el Instituto de Vivienda de Tabasco (Invitab) a partir del 2010 firmó convenios de colaboración con estas dos entidades ejecutoras para beneficiar a los tabasqueños, así lo dio a conocer el coordinador de Soluciones de Vivienda de esta dependencia, Armando Tosca Alfaro.
El funcionario estatal indicó que a los organismos estatales de vivienda se les denomina Orevis de manera general, porque en el país hay entidades que les denominan comisiones y en otras institutos, por lo que para no entrar en detalles, se creó Organismos Estatales de Viviendas (Orevis), que subsidia recursos para aquella población que no tienen facilidades de una vivienda.
“Los organismos estatales de viviendas podemos ser entidades ejecutoras, siempre y cuando presentemos una serie de requisitos en donde básicamente vamos a demostrar toda la parte legal, cómo estamos constituidos, quién es nuestro representante legal, oficinas”.
En los últimos tres años, 628 acciones de vivienda
Tosca Alfaro detalló que en general, ejercieron 19 millones de pesos en los últimos tres años, es decir, desde que se inscribieron al Orevis, por lo que con la aportación de nueve millones 500 mil pesos, en total ejercieron 28 millones 500 mil pesos, realizando un total de 628 acciones de viviendas, bajo este programa, beneficiando de esta manera a igual número de familias.
“Con este programa se hicieron estas acciones denominado en el Orevis el 2×1, es decir, una vertiente que la Conavi puso en operación en 2010, en la que invitó a los institutos de viviendas, que así lo quisieran hacer a participar una bolsa adicional; que quiere decir esto, que por cada peso que pusiera la Federación, el Estado pondría dos”.
Señaló que en el 2010, Tabasco fue de los pocos estados que en ese año le entraron a ese programa junto a otros seis o siete aproximadamente y le apostaron en aquel entonces, con 20 millones de pesos, por lo que la Conavi puso 10 millones de pesos y con ello se iban a bajar los subsidios.
Vivienda para trabajadores de bajos ingresos
“Se le llama bolsa adicional 2×1 y es que un trabajador de Infonavit de los que ganan hasta 2.5 salarios mínimos, lo que es decir, alrededor de cuatro mil 500 pesos mensuales, que por lo bajo de su salario, el monto de su crédito no le alcanza para comprar una vivienda, normalmente el monto de su crédito aparece entre 160 mil y 180 mil pesos; mientras que las viviendas en 2010 tenían un costo de 210 mil pesos, y ahí es donde ese trabajador podría hacerse acreedor a ese subsidio”.
Agregó que específicamente en este año, se ejecutó un recurso por el orden de los tres millones 254 mil 687 con 47 centavos y la aportación de Conavi fue de un millón 627 mil 343 pesos con 74 centavos pare realizar 97 acciones de vivienda y beneficiar a este mismo número de familias.
Beneficio para quienes no cotizan para vivienda
Por otro lado, Tosca Alfaro indicó que otro programa fue más abierto a la ciudadanía en general, es decir, para aquellos que no cuentan con cotización en ningún instituto de vivienda, “esos programas son los que manejamos como Orevis, eso entra en el rubro de lo que Conavi denomina como subprograma Orevis, que se otorgaa los organismos estatales de vivienda; en donde se ejercieron recursos por el orden de 14 millones 701 mil 692 pesos, tan sólo en este 2012”.
Señaló que con este programa, entraba lo que es la autoproducción, es decir, aquel beneficiado que tenía terreno pero no casa, se le proporcionaba el recurso para que construyera su casa, lo que llevó a realizar en esta modalidad 75 acciones donde se beneficiaron a igual número de familias.
Señaló que la novedad de estos dos programas fue no concentrar en Villahermosa a los beneficiarios, sino dispersarlo en todos los municipios, ya que con ello se generó derrama económica para los microempresarios de esas localidades y hubo flujo del dinero, “se dispersó y hubo movilidad del recurso”.
El funcionario del Invitab sostuvo que “de 2010 a 2012, se realizaron 1 mil 920 acciones de viviendas, de las cuales 75 fueron por autoproducción, 27 de palafitos y dos adquisiciones; el resto se apegó a lo que el programa marca en su reglamento de operación”.
