Solicita amparo el abogado defensor de Andrés Granier
El defensor señala que no existe el Estado de Derecho al arraigar a su cliente antes de que venciera el plazo para que compareciera ante la PGJ Luis Ruiz Sandoval Frade Rumbo Nuevo Confirma el abogado del ex mandatario tabasqueño Eduardo Luengo Creel que se violó el derecho constitucional de su cliente, puesto que antes […]
15 de junio de 2013

El defensor señala que no existe el Estado de Derecho al arraigar a su cliente antes de que venciera el plazo para que compareciera ante la PGJ

Luis Ruiz Sandoval Frade
Rumbo Nuevo
Confirma el abogado del ex mandatario tabasqueño Eduardo Luengo Creel que se violó el derecho constitucional de su cliente, puesto que antes de vencerse el plazo para la comparecencia en la PGJ de esta entidad, ya un juez solicitó un arraigo “lo cual habla que no existe el Estado de Derecho, y por supuesto que se impugnará”.
En un comunicado del despacho de abogado de esta firma, Luengo Creel afirmó que su cliente no acudirá a Tabasco a comparecer ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), en parte por su delicado estado de salud y en parte ante la decisión de la autoridad ministerial de arraigarlo.
“Si la PGJE quiere la comparecencia deberá aceptarla sólo por escrito o enviar personal a la Ciudad de México a que busque la declaración, de otra forma será imposible”.

Presentan juicio de amparo
La defensa del ex gobernador Andrés Granier Melo presentó una demanda de amparo en contra del arraigo que decretó una juez de Tabasco en su contra, por los delitos de ejercicio indebido del servicio público y peculado, a fin de revertir la medida cautelar decretada por 30 días.
El despacho de abogados de Eduardo Luengo Creel informó que, como complemento a la demanda de amparo presentada en contra del arraigo y traslado solicitado por la Procuraduría de Justicia del Estado de Tabasco (PGJE), la defensa presentó ante el Juzgado de Distrito y la Procuraduría General de la República (PGR) el certificado médico que expide el Dr. Juan Carlos Peláez Piedrahita, cardiólogo del Hospital Ángeles de la Ciudad de México y encargado del cuidado médico del Químico.
Dejó en claro que “el certificado presentado para los efectos legales a los que haya lugar, certifica que de trasladar al Químico Andrés Granier fuera del Hospital su vida correría un enorme riesgo, dadas las condiciones médicas en las que se encuentra. Asimismo, el Dr. Juan Carlos Peláez Piedrahita señala que se deslinda de cualquier responsabilidad en caso de intentar movilizarlo”.

Granier podría sufrir infarto
Ante las condiciones de salud que presenta el ex gobernador de Tabasco, Andrés Granier Melo, que podrían derivar en un infarto, el médico del Hospital Ángeles responsable de su atención, Juan Carlos Peláez Piedrahita, indicó que este cuadro «obviamente pone en peligro la vida del paciente», por lo que rechazó que pueda ser trasladado y se deslindó de responsabilidad si es sacado del nosocomio.
El certificado médico, firmado por el cardiólogo señala que: Andrés Rafael Granier Melo, masculino de 65 años de edad, portador de hipertensión arterial sistémica. Es importante notar que el Sr. Granier aun estando bajo tratamiento médico con dos antihipertensivos (ibersartan y metoprolol) a dosis máxima, el día de ayer presentó una crisis hipertensiva. Esta crisis hipertensiva se confirmó al registrarse su presión arterial a su llegada a urgencias en 160/110mmHg, razón por la cual se administró de manera inmediata un medicamento para su control».

Se añade que «no obstante estando en su domicilio y en reposo el Sr. Granier presentó un cuadro de dolor torácico que describió como opresivo, acompañado de disnea, diaforesis y sintomatología neurovegetativa. La forma en que se presentó el dolor sin un esfuerzo físico previo puede ser indicativo un importante problema coronario».
Aclara que tener un paciente de la edad de Granier «con datos clínicos de isquemia miocárdica en reposo eleva el riesgo de que el paciente en cualquier momento puede presentar lesión o necrosis miocárdica (infarto), lo cual obviamente pone en peligro la vida del paciente».
Por lo anterior, expuso «de ninguna manera puedo considerar el traslado del paciente a otra unidad médica y no me haré responsable de los eventos que ocurran durante el traslado o después de que abandone el hospital».

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