Jorge Núñez
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La derogación del impuesto estatal vehicular, que entrará en vigor a partir de 2015, podría tener un impacto muy favorable para el PRD en los comicios del año entrante.

Los tabasqueños han aplaudido la difícil decisión del gobernador Arturo Núñez, ya que su eliminación representará un sacrificio fiscal de 300 millones de pesos para las arcas estatales.

Aunque el propio mandatario aseguró que la derogación de la tenencia no es retroactiva, su puesta en marcha representará un gran alivio para los bolsillos de los cientos de miles de automovilistas.

Lo más importante: el secretario de Finanzas, Víctor Lamoyi Bocanegra, ha descartado la creación de nuevos impuestos para compensar los ingresos que se generaban por este concepto.

La eliminación de la tenencia, anunciada en el mensaje del II Informe de Gobierno, tiene su razón de ser en la eficiencia de la recaudación de otros impuestos y en el refinanciamiento de la deuda.

Por lo mismo se tienen recursos adicionales en la proyección de ingresos del próximo año, derivado de las contribuciones petroleras, así como por la eficiencia en la recaudación de otros impuestos.

Tabasco se convierte así en el octavo estado del país que no lo cobra, lo que no deja de llamar la atención porque los críticos de este gravamen habían asegurado públicamente que casi todas las entidades del país ya lo habían eliminado.

Los priístas han reconocido abiertamente el acierto de Arturo Núñez en este caso, como lo confirman las declaraciones de la siempre controvertida Lorena Beauregard, quien lo calificó como un “acierto”.

La derogación de la tenencia, prometida por Arturo Núñez en campaña, llega con algo de retraso, debido a la situación de emergencia en que se encontraron las finanzas estatales. Antes era imposible eliminar el impuesto porque sencillamente no había manera de cubrir ese déficit.

Núñez quita así una importante bandera política a los opositores. El PVEM de Federico Madrazo colocó varios espectaculares abordando el asunto, y el PRI de Erubiel Alonso también se había pronunciado al respecto, exigiendo su quita.

La eliminación del IEV podría generar muchos votos en favor del PRD. El impacto en los bolsillos de muchos tabasqueños es directo, y esto seguramente tendrá un efecto político-electoral en favor del gobierno en el poder.

Desdén
La oficina del jefe del Ejecutivo local, Arturo Núñez, giró  las invitaciones correspondientes a todos los exgobernadores de Tabasco… sin excepción alguna. Por ello acudieron al II Informe desde Enrique González Pedrero hasta Enrique Priego Oropeza, pasando por Víctor Manuel Barceló y Manuel Gurría Ordoñez. Los únicos que se abstuvieron de asistir fueron Roberto Madrazo y Manuel Andrade. Fuentes extraoficiales revelan que Madrazo y Andrade acordaron mutuamente no acudir, con el propósito de seguir teniendo el hacha al hombro frente al gobierno perredista. Roberto Madrazo, detrás del PVEM, y Manuel Andrade, aspirante a una diputación federal, han optado por ahondar el viejo pleito político con Núñez. Es algo que muchos de sus pares no entienden, porque, después de todo,  lo “cortés no quita lo valiente”.

Mayans
Quien sí optó por acudir al mensaje del II Informe fue el coordinador para la Atención de los Migrantes en la Frontera Sur, Humberto Mayans Canabal. Arturo Núñez  citó públicamente a su añejo adversario al nombrar a los asistentes más importantes. Mayans se puso de pie para agradecer a Núñez su mención y, una vez terminado el mensaje, felicitó al mandatario con un fuerte apretón de manos y una palmada en el hombro. Es muy poco probable que Núñez y Mayans hayan reconciliado sus diferencias después de tantas batallas políticas, pero sí es evidente que el gobernador ha dado muestras de una institucionalidad que va más allá de los viejos enconos.