Peña Nieto le habría pedido a Trump no abordar la construcción de un muro fronterizo ni sus planes de sacar a EEUU del TLCAN

Ciudad de México
Agencias
El presidente de EEUU, Donald Trump, «se molestó» con su par de México, Enrique Peña Nieto, que le pidió no hablar más del muro fronterizo, y suspendió una reunión bilateral, según una versión de la Casa Blanca al semanario mexicano Proceso.
La plática entre ambos mandatarios, celebrada el martes 20 de febrero, «iba bien hasta que el presidente Trump se alteró y levantó la voz, en desacuerdo por no tener libertad para que durante su reunión con el presidente Peña Nieto hablara sobre sus promesas de campaña en referencia a México», reveló la fuente de la Casa Blanca al corresponsal de Proceso en Washington, Jesús Esquivel.
Peña Nieto le habría pedido a Trump no abordar la construcción de un muro fronterizo ni sus planes de sacar a EEUU del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, según el recuento que ofreció el funcionario de la Casa Blanca, que pidió el anonimato a la influyente revista de análisis político, publicado en las páginas 32 a 34 en la edición semanal que comenzó a circular este 25 de febrero.
«El presidente (Trump) pretendía hablar del muro en la frontera y de su posición respecto a las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, lo cual no le pareció al gobierno mexicano y todo lo pactado se anuló», matizó el funcionario estadounidense
Esa versión filtrada al corresponsal del semanario, desvela los comentarios hechos en una reunión del Consejo Nacional de Seguridad de la Casa Blanca, al concluir la conversación telefónica entre los dos mandatarios.

Negociaciones abortadas
Tanto la Casa Blanca como la residencia presidencial mexicana de Los Pinos informaron en forma escueta sobre la llamada de los mandatarios, y omitieron señalar si habían acordado una fecha, lugar y agenda para la reunión que había sido confirmada para «las próximas semanas» por el Departamento de Estado y el canciller mexicano Luis Videgaray, quien se reunió el 14 de febrero con el yerno y asesor de Trump, Jared Kushner.
Los presidentes «se comprometieron con avanzar en las negociaciones sobre temas de seguridad, comercio y migración, durante una conversación telefónica este martes», informó la presidencia de México el 20 de febrero.
Sin embargo, en la llamada, Trump «reclamó el hecho de que nadie lo consultara sobre los detalles definidos por Kushner y Videgaray para la supuesta visita del presidente mexicano», explicó el funcionario de la Casa Blanca.
Según el relato, «el carácter irascible e impredecible del presidente Trump presuntamente sorprendió al Gobierno mexicano», quien confiando en su canciller, tenía la impresión de que todo lo acordado por Videgaray con Kushner se iba a concretar, pero no fue así.
Conforme al relato de la conversación, el yerno y asesor del mandatario «no expuso claramente a su suegro la posición del gobierno de México».