Como ocurre con toda la infraestructura cultural, patrimonio de los tabasqueños, pudimos volver a “poner al día” al Museo ‘José Narciso Rovirosa’, que recobra su lugar como el más importante de su tipo en el sureste, afirmó el gobernador Arturo Núñez
Con el rescate y modernización del Museo de Historia Natural ‘José Narciso Rovirosa Andrade’ –rehabilitado en su estructura arquitectónica, actualizado en su museografía y adaptado con innovaciones para que pueda ser disfrutado por todos los públicos, incluidas personas con discapacidad–, este recinto cultural recobra su lugar como el más importante del sureste.
En su reapertura, el gobernador Arturo Núñez Jiménez afirmó que como sucede con el Planetario Tabasco 2000, el Parque-Museo La Venta, la Zona CICOM, el Centro de Estudios e Investigación de Bellas Artes, el Teatro ‘Esperanza Iris’, la antigua Aduana de Frontera y toda la infraestructura cultural del estado, pudimos volver a “poner al día” el Museo de Historia Natural, al que desde su inauguración en 1988 no se sometía a renovación.
Destacó que esta gran obra de infraestructura, que permite a niños y adultos informarse de temas de historia natural, del entorno ambiental, también embellece la capital tabasqueña, pues forma parte del conjunto cultural y recreativo a orilla de la laguna de las Ilusiones, donde se ubican el parque ‘Tomás Garrido Canabal’ y el Parque-Museo La Venta, que exhibe piezas de la cultura Olmeca y es único al aire libre del mundo prehispánico.
Núñez Jiménez recordó que durante una visita al recinto, en 2015 –en el marco de su visita para inaugurar parte de la infraestructura cultural de la zona CICOM–, el entonces director de Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa, lamentablemente fallecido, le propuso se replanteara la museografía del museo y se enriqueciera con nuevas presentaciones, de acuerdo con los avances en la ciencia y el conocimiento sobre la Tierra, sobre la evolución del hombre y sobre diversas especies vegetales y animales.
“Así que hoy recuerdo a Rafael Tovar y de Teresa por su aportación para que este museo sea hoy lo que vamos a ver que es”, enfatizó el gobernador durante el acto de reinauguración –el 9 de enero–, en compañía de la presidenta del Consejo Consultivo del Sistema DIF Tabasco, Martha Lilia López Aguilera.
El mandatario se congratuló de que esta obra –a la que consideró “un doble patrimonio de los tabasqueños: una parte natural y otra cultural”–, contenga un sentido moderno de los museos al incluirse adaptaciones e innovaciones para personas con discapacidad. “Es el primero con un video con lenguaje de señas para que las personas que tienen problemas auditivos también lo disfruten”, resaltó.
Patrimonio cultural, “puesto al día”
El gobernador Núñez destacó que este recinto fue pionero en el ámbito de los museos de historia natural en el sureste del país, y recalcó que con este esfuerzo de reconstrucción en el que se invirtieron 27.6 millones de pesos, “lo hemos puesto al día”, ya que no sólo se le dio el mantenimiento debido sino que fue reconstruido en buena parte.
Puntualizó que esto se hizo como parte del ambicioso proyecto de rescate del patrimonio cultural de los tabasqueños, el cual considera que la obra pública no solo consiste en acciones nuevas que resultan necesarias y son obligadas por el crecimiento de la población, sino también en dar atención a lo ya construido, que no se incluye en los presupuestos públicos y se deja al paso del tiempo, “como si la divina providencia fuera la que le va a dar mantenimiento”.
Todavía dentro de la infraestructura –prosiguió–, la cultural pareciera ser “de lo menos urgente”, pues tiende a relegarse y abandonarse, porque desde un punto de vista político-electoral no luce, no tiene la misma valoración de una obra nueva, aunque a veces éstas sean ‘elefantes blancos’ que luego no tienen utilidad, como el Cenma o el Musevi.
Apuntó que su gobierno busca equilibrar las inversiones en obra pública, realizando acciones nuevas y, también, rehabilitando, renovando las que ya existen, pues no solo se trata de un mantenimiento ingenieril o el obligado por el deterioro de la instalación con el paso del tiempo, sino también de una recreación como se hizo con el Museo de Historia Natural, inaugurado en 1988 y que ahora cuenta con una nueva museografía.
Un recinto ideal para atraer visitantes
La directora del Instituto Estatal de Cultura (IEC), Gabriela Marí Vázquez abundó sobre el intenso trabajo realizado en dicho espacio. “Hemos buscado crear el museo más importante de historia natural del sur-sureste de México que convoque al mayor número de visitantes nacionales y extranjeros, convirtiéndolo en un espacio educativo, científico, cultural y recreativo de la mayor trascendencia, en donde se divulgarán las ideas más avanzadas en torno a la evolución natural y se exhibirán la diversidad cultural y natural del sur de nuestro país”, planteó.
La nueva versión del Museo de Historia Natural responde a todas las exigencias de los visitantes, enfatizó la titular del IEC, y resaltó las adecuaciones que permitirán que los atractivos puedan ser disfrutados por personas con discapacidad, ya que cuenta con rampa eléctrica para silla de ruedas, elevador especial y una sala equipada con una versión de lenguaje en señas.
Aquí se divulgan las ideas más avanzadas en torno a la evolución, y se exhibe la diversidad cultural y natural de esta región del país, subrayó Marí Vázquez en la reapertura del recinto, que contribuirá a reactivar el corredor recreativo conformado por los parques ‘Tomás Garrido’ y La Venta.
Expuso que cuando abrió el museo, hace 29 años, fue uno de los primeros de su tipo en el país y desde entonces no había sido rehabilitado ni actualizado; por ello se priorizó su reparación y actualización museográfica.
Ahora –remarcó– el museo no sólo se adapta a la modernidad a partir de nuevas corrientes de arquitectura y herramientas de interactividad, sino se suma a una necesidad imperiosa de concientización en esta zona de humedales del mundo: sensibilizar para la conservación de nuestro entorno natural.
Además de la actualización museográfica, la obra de rehabilitación integral contempló el rescate de fachadas, pisos e instalaciones eléctricas; renovación del sistema de aire acondicionado; adecuación del acceso a personas con discapacidad, y la reparación de muros, plafones y sanitarios, así como la edificaron de una nueva techumbre en el acceso principal (apropiada para exposiciones itinerantes), y de fachada con azulejo tipo veneciano, detalló la directora general de Proyectos de la SOTOP, Alma Lutzow Garrido.
Este inmueble cuenta con seis salas de exhibición en las que se explica la evolución geológica de nuestro planeta, la aparición del hombre y su recorrido por la Tierra, con el objetivo de promover los conocimientos, la ciencia y diversidad biológica, así como mostrar la historia y transformación de los seres vivos. El horario de servicio es de lunes a viernes de 9:00 a 16:00 horas, y los sábados, domingos y días festivos de 9:00 a 18:00 horas.
Un museo para disfrutar con realismo la historia del planeta
El renovado Museo de Historia Natural ‘José Narciso Rovirosa’, cuenta ahora con un recorrido más orgánico y amigable; los colores, sonidos, juegos de luces y la tecnología implementada, permitirán disfrutar lo más real posible de los seres que habitaron esta parte del planeta, planteó el historiador Ricardo de la Peña Marshall.
Su rehabilitación y remodelación logró captar la esencia de lo que es este tipo de museos, afirmó quien fue el primer director de este recinto inaugurado en diciembre de 1988, quien destacó que los visitantes podrán encontrar en cada una de sus cinco salas la historia de la Tierra, la evolución del ser humano y la flora y fauna de nuestro estado.
Asimismo, mediante la tecnología se dispone de ‘mappings’ y pantallas; para el acceso de personas con discapacidad se habilitaron una rampa para silla de ruedas y un elevador especial, resaltó.
Ricardo de la Peña invitó a las familias a visitar este espacio donde además de aprender tendrán un disfrute emocional y científico, aparte que podrán disfrutar del corredor cultural y recreativo que conforman los parques Museo ‘La Venta’ y ‘Tomás Garrido’, y la laguna de las Ilusiones.
