En toda esta zona que conforma el distrito 4, en las comunidades de ambos municipios, es enorme el repudio que le tienen a María Esthela debido, a prometió tejas, cemento y otros beneficios y, nunca los entregó

Cárdenas
Manuel Luna Arias
Corresponsal

Mientras los priistas están muy contentos porque la cúpula perredista está achechando a María Esthela De la Fuente Dagdug al quererle dar la candidatura  a diputada local por el cuarto distrito, zona en la que los engañó cuando fue legisladora federal, muchos perredistas están molestos porque, el PRD se convirtió en otro partido antidemocrático al no respetar el trabajo de los precandidatos a dicha posición e imponer a la huimanguillense.
Hace poco más de dos años, María Esthela formaba parte de los priistas que saquearon Tabasco junto al hoy presidiario, Andrés Ganier y, como no le cumplieron su capricho de ser candidata a presidenta municipal, decidió apoyar al hoy alcalde, Pancho Sánchez quien, ha tenido que darle trabajo por medio de constructoras que tiene con prestanombres.
Siendo priista, cuando fue diputada federal, posición en la que engañó tanto a huimanguillenses como cardenenses, demostró ser una mujer ambiciosa ya que, durante el tiempo que estuvo en precampaña para la presidencia, no cedió dicho cargo a su suplente, Eladio de la Cruz Maldonado.
En toda esta zona que conforma el distrito 4, en las comunidades de ambos municipios, es enorme el repudio que le tienen a María Esthela debido, a prometió tejas, cemento y otros beneficios y, nunca los entregó.
Ante esta clara imposición que quiere hacer la cúpula perredista en el distrito 4, de esta ex priísta la cual ni hizo campaña, muchos perredistas adelantaron a este medio, que no votaran por esta oportunista ya que, “es una mujer que no tiene palabra”.
Lo anterior, se dio luego de que esta ex funcionaria de Granier, acarreando gente, hizo un cierre de campaña en el que, fueron muy pocas personas.