Proyecto “CCC”
Ordóñez. O La Comedia de las equivocaciones César Graciano Calvario cesargracianoc@yahoo.com.mx Como en la celebrada obra de William Shakespeare (aunque aquí no se trate de gemelos) Arturo Núñez se equivocó con Manuel Ordóñez, Manuel se equivocó con el gobernador, nosotros nos equivocamos con Manuel. Lamentablemente, en esta comedia, hay lastimados: La población a la que […]
30 de julio de 2015

Ordóñez. O La Comedia de las equivocaciones

César Graciano Calvario
cesargracianoc@yahoo.com.mx
Como en la celebrada obra de William Shakespeare (aunque aquí no se trate de gemelos) Arturo Núñez se equivocó con Manuel Ordóñez, Manuel se equivocó con el gobernador, nosotros nos equivocamos con Manuel. Lamentablemente, en esta comedia, hay lastimados: La población a la que ha afectado el errático manejo de la que es la principal actividad operativa del gobierno estatal: La construcción de la obra pública. De la cual fue responsabilizado Ordoñez desde el 1° de enero de 2013, como secretario de esa dependencia del ejecutivo.

Según todos los indicios (no se conoce comunicado oficial alguno hasta el cierre de esta columna) el martes a mediodía el gobernador Núñez pidió a Ordoñez su renuncia. Lo cesó. Independientemente de que se produzca la confirmación oficial, en realidad ya no hace falta. Son del conocimiento público las razones por las que tuvo que darse la decisión del gobernador. Lo eran hace un buen rato. No las reproduciremos aquí, pero son similares a las que se dieron en el affaire de Roberto Romero del Valle ¿recuerda?  Aunque ahora la virulencia está más direccionada hacia la esposa del gobernador.

Pero. ¿Qué fue lo que pasó? Equivocaciones. Lamentables equivocaciones. El gobernador Núñez al parecer no sabía bien a bien quien es en realidad el famoso Charro. Mucho menos quien era su ahora famoso hijo. Vida, obra, hazañas y capacidad imaginativa. Lo cual sabe cualquier persona medianamente informada. Y todavía parece que sabía menos, la muy personal forma que tiene el Charro de llevar sus relaciones familiares. Es el incuestionado Jefe de esa familia. Con todo lo que ello implica. Y más allá, si lo juzga necesario.

Manuel también se equivocó con Arturo Núñez. Pensó que lo podría envolver, como a nosotros, con sus reales intenciones disfrazadas de visión gubernamental hacia la eficacia, la lealtad y la transparencia, desde el primer año de gobierno. Después, encubriendo la insatisfacción de sus personales intereses, pero reflejando ésta en el ejercicio de su función. Por último, pensando que el gobernador dejaría estirar la liga ad infinitum, en aras de la corrección política a la que es tan afecto. O dando excesiva consideración a la posible reacción del propio Ordóñez.

En fin. Nos equivocamos al dar el beneficio de la duda a las intenciones declaradas por Manuel de trabajar por tabasco. Como no se le dio la manga ancha que exigía, se aisló y nadó de muertito hasta el pasado martes. En el limbo quedaron los grandes planes de la inversión de obra pública en los rangos de los 5-10 mil millones de pesos anuales. Culpa de los administradores y financieros del gobernador que lo maniataron, dirá él. Pero lo que no podrá rebatir es su falta de interés para cumplir con otra de las principales tareas que le encargó el gobernador aquel 1° de enero de 2013: el acopio de los elementos suficientes para llevar ante la justicia a su antecesor Granierista, Héctor López Peralta, uno de los grandes beneficiarios del saqueo y pillaje realizado en aquella administración.

Como pronto, al despuntar del sexenio, en su fuero interno, se convenció de que no podría llevar a cabo su personal proyecto, se hizo mosca. Se amorcilló. Se hizo el desentendido. El mensaje fue recibido, y aunque tarde, tuvo respuesta este martes.

…..a pie de carretera

Maday Merino
Mencionamos su nombre como consejero presidente del IEPCT. Pero en realidad podría ser cualquiera de sus otros compinches. Con el grado de descalificación y desprestigio que cargan y siguen muy pendientes de cualquier posibilidad para saquear los recursos del instituto electoral. Ahora, aprovechando que la ley y la autonomía les permiten hacer lo que se les dé su chingada gana con los recursos presupuestales asignados, pretenden hacerse de un jugoso bono por FIN DE TEMPORADA ELECTORAL. Y como han sido criticados aducen: No haremos nada deshonroso. Si sobra presupuesto después de los compromisos pagados ¡nos lo repartiremos! Así de poca vergüenza.

Que tenga un magnífico día. Le busco mañana SDQ. Adiu

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