Clase política irresponsable

César Graciano Calvario
cesargracianoc@hotmail.com
Está bien visto que la inseguridad en Tabasco no puede ser comparable con la de otros estados identificados como una sucursal del infierno. Pero la de aquí, con sus características particulares, es la peor para nosotros. Nos duele y ofende. No necesitamos compararnos con los demás. Vivimos nuestro propio infierno. Las cifras, los datos, la relación de los hechos delictivos, de las agresiones a la familia tabasqueña, no necesitan ser metidos a un ranking para ser sopesados.

Este último fin de semana ha sido particularmente penoso por la cantidad y las características de los atentados que han sufrido numerosas familias. Ello ha despertado la inquietud y la angustia entre los mismos observadores, analistas y comentaristas quienes casi coinciden recomendando a la sociedad civil que hurgue en la revisión de las condiciones de vida que lleva, porque seguramente ahí está en buena medida la explicación de la escalada de la violencia. Por la falta de aplicación estricta de una tabla de valores que genere por si misma los antídotos producidos en el seno familiar. También por la falta de cohesión, integración social-vecinal y colaboración con las autoridades para paliar la incapacidad que estas han demostrado para detener en seco la ola criminal y delictiva.

Pero. Reconociendo como válida, útil y necesaria, la convocatoria mencionada antes, consideramos que va siendo necesario identificar a los responsables de que la evolución del fenómeno en lugar de tomar un curso hacia el control, lo haga hacía la escalada. Acelerada. Y estos no son otros que los integrantes de la llamada “Clase política”. Autoridades de todos los niveles. Representantes populares. Dirigencias partidistas. Aspirantes, Grillos, Meretrices, Chichifos y Mala-fachas de toda laya metidos de cabeza dentro del pastel del poder. Unos defendiendo su pedacito logrado con tanto esfuerzo. Otros dedicados en cuerpo y alma a echarlos fuera para apoderarse del manjar.

Porque a eso están dedicados. No a otra cosa. Véalos corriendo con las zapatillas en la mano de un lado a otro buscando el mejor acomodo para cuando abran las agencias de colocaciones con fines electorales. O tirándose con lo que tienen a la mano para ridiculizar al adversario con una toma fotográfica en el instante mismo del impacto. O haciéndose de la vista gorda ante los reclamos sociales para evitar una intervención que podría despeinarlos, o hacer que se les corra el rímel.

Obsérvelos Usted. Absortos en sus respectivos juegos. Cartas, Dominó, Tablero de ajedrez, Serpientes y Escaleras, Rentoy, Rayuela y hasta dardos. Pero todos, sin excepción, cuando oyen, o ven, las noticias sobre los hechos violentos, hacen como que la Virgen les habla y voltean para otro lado. Cuando mucho algunos aprovechan la baza para –con cara de circunstancias, pero divertidísimos en el fondo- aventar puñados a la cara de sus oponentes.

Pero nadie está dispuesto a buscar al OTRO para hacer a un lado las infantiles razones de sus reyertas, y unir esfuerzos en la construcción de un formidable dique de protección para la población. ¿Acaso esperan la aparición de Autodefensas? ¿O de los Vengadores anónimos? O de plano ¿dejaran el campo para que alguno de los grupos que promueven el crimen y la delincuencia lo acapare imponiendo su ley y aniquilando a su competencia?

….a pie de carretera

Cuco Rovirosa
No damos crédito. (y no somos Bancomer) No hay semana que no de la nota. Ha pasado de integrar las abigarradas listas de aspirantes a la candidatura para gobernador en las elecciones del 18; Recomendar a las autoridades estatales la protección e impulso a la industria de la butifarra como medio más efectivo para lograr un boom en el desarrollo de la entidad; Y ahora lanza una advertencia al delegado del CEN priista Jorge Salomón Azar: Si no consulta las bases para elegir al nuevo dirigente partidista estatal, todo ese partido se irá al caño.
¡E-s-t-e-C-u-c-o-s-i-s-e-v-e!

Loor y Prez para Fidel Castro. Comandante supremo de la Revolución Cubana. Murió el hombre, nació la leyenda. Gracias a los adversarios sobre los que triunfó, logró la supervivencia digna y respetable de su país. Hasta la Victoria ¡Siempre!

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