Estamos mal. ¡Pero vamos bien!*

César Graciano Calvario rose
cesargracianoc@yahoo.com.mx
*Frase inmortal, si las hay, de Carlitos Menem (citado por Tomás Eloy Martínez en su ensayo “La Argentina de Borges y Perón” Nexos, feb 2010). ¿Se acuerda de él?

Los argentinos SI. Fue su presidente en épocas aciagas. Y vaya que los argentinos son expertos en tales menesteres. Menem se dirigía así al pueblo argentino en el momento de un informe a orillas del precipicio. Nadie sabía si creerle o no, dados sus amplios antecedentes de corrupción, frivolidad y capacidad de manipulación criminal. Querían, necesitaban, creer en algo. Por eso dudaban al oírlo.

Eso mismo pasa el día de hoy en México. En el día del 3er informe presidencial de Enrique Peña. Acudiendo a su herramienta maestra, la comunicación mediática, nos ha anticipado lo que Menem recetaba a su auditorio. “Estamos mal. Pero vamos bien” agregando ¡y le vamos a echar más ganas! Como en este país –al que trae muy movido, como bien alardea- todos tenemos la imperiosa necesidad de asirnos aunque sea a un clavo ardiendo, y para las próximas elecciones aún faltan poco más de mil días, no tenemos más alternativa que confiar en que de alguna forma algo impedirá el colapso anunciado por los tercos indicios.

La última hazaña presidencial del cambio de medio gabinete no da muchos elementos para ese optimismo obligatorio. La opinión especializada y los principales analistas sociales así lo consideran. No como los “Walter Mercado” que ya ven al burócrata José Antonio Meade (M_E_A_D_E, no mid, como algunos zalameros le clavan) como el candidato priista en 2018. Sin importarles el verdadero significado profundo de la ocurrencia presidencial.

A saber: Que las relaciones de México con la comunidad internacional, en momentos tan críticos, no son asunto prioritario de su gobierno. Cualquiera puede hacer (es un decir) la chamba de Genaro Estrada, Juan F. Noyola, Antonio Carrillo Flores, etc., etc. Que en el asunto del turismo, nada más no tenemos prisa. Que se tiene decidido llamar a James Bond (agente 007, con licencia para matar) si esto es necesario para contener a los de la CNTE y para mantener enclaustrada a la maestra Elbita. De paso, defender la reforma educativa. Y así……

Lo más grave del asunto es que, independientemente del ingenio e inventiva que muestren los creativos de la presidencia en los materiales que todavía nos endilgará Peña durante varios días después de la entrega de su Informe, en realidad ni son necesarios estos. Podría ahorrarse los recursos presupuestales que consumirá la campañita de atolito con el dedo, que de cualquier forma, no hay quien pueda salvarnos de las ocurrencias que todavía nos asestará.

Para afirmar esto, solo hemos tenido que voltear a mirar la integración de la nueva legislatura federal que también inicia hoy. ¡El Congreso está en manos del PRI! Y de su paniaguado el Verde, claro. Para promover, y en su momento sacar, sus iniciativas-ocurrencias, a su libre antojo, no necesitan ¡ni al PAN! Mucho menos al resto de la, ahora sí, chiquillada. Que entretenida en sus pleititos, nada más no pinta para evitar que el PRI-Verde cocinen desde ahí para el 2018.

La oposición tendrá que reinventarse desde otros espacios, y ya no tiene mucho tiempo.

……a pie de carretera
Andrés de la Cerda
Nunca lo mencionamos aquí. Pero desde el principio del sexenio su capacidad empresarial fue objeto de observaciones y comentarios. Sobre todo cáusticos. Pero se le dejó caminar, con el beneficio de la duda. Ahora que Javier Herrera ha exhibido las “pruebas” de que algo aparentemente turbio se cocinó con el aval cómplice del INEA, esto viene a encajar perfecto en los pronósticos de quienes veían desde el principio a De La Cerda como un mercader incrustado exprofeso en la televisora estatal, con objetivos aviesos. Es tiempo de las aclaraciones gubernamentales, y los minutos pueden ser determinantes. Ya van varias horas.

Septiembre. ¡Arrancamos! Fin del año a la vista. Así es que ¡a conseguirse unas pilas! Le busco mañana aquí, SDQ. Adiu
Facebook cesar.stone@yahoo.com.mx
Twitter @CsarGraciano