• Gracias, por un año más de vida
• Gutembert Rivero, dejo un gran legado a los villermosinos con sus figurillas
• Muchos fueron los personajes populares que plasmó en papel mache

Francisca Alamilla Ocaña
entreverado_columna@yahoo.com.mx

Por un año más, estoy agradecida con Dios y mis padres por haberme dado vida y por el simple hecho de poder seguir en este camino tan hermoso lleno de un sinnúmero de alegrías y tristezas,  pero eso sí,  con mucha fuerza, fe y esperanza para poder seguir hacia adelante sin mirar atrás.

Ante este día tan importante,  no me canso de darle gracias a Dios por todo lo que me ha dado  y quitado, por darme una familia aunque no perfecta  hermosa, por los pocos o muchos amigos que tengo y por los demás  años que él me conceda, por esto y por mucho más viviré agradecida.

GUTEMBERT RIVERO.- Sin duda que el homenaje permanente que la UJAT le tiene a Gutembert Rivero  Ramírez  en la sala de espera de Rectoría es merecido para este gran artesano tabasqueño que toda su vida la invirtió en hacer maravillas de papel como él decía,  pero creo a mi parecer,  que su obra más importante fueron sus figurillas de papel, todas ellas exitosas en las que dejo plasmado el acontecer del Villahermosa de ayer.

Para lograrlo solo necesitaba un poco de papel periódico, engrudo, pinturas, un agudo poder de observación, sensibilidad innegable, una paciencia no exenta de ternura y  henchidos de color y alegría  con lo que recato un sinnúmero de personajes que hace más de 40 años hicieron historia en el antiguo San Juan Bautista, hoy Villahermosa.

El artesano como él se autonombraba, en su mundo mágico y del recuerdo, plasmó en cada una de las figurillas que diseñaba a los personajes  que dormían en las letras de las canciones populares tabasqueñas, como un intento de rescatar imágenes con muchos años de tradición.

El artista hizo demostraciones de su talento en esa minuciosa escena donde como ya se dijo el ingenio y el humor brotaban sobre todo porque fueron personajes que él conoció y trató, de ahí sus ojos captaron para siempre cada una de esas imágenes.

Su trabajo siempre fue autodidáctico, no le perteneció a ninguna técnica ni patrón, motivo por el cual nunca pudo enseñar  sus experiencias en la elaboración de piñatas, carteles, figurillas de papel, restauración de imágenes y diseñador de obras plásticas en diferentes materiales, generalmente de la región.

Pero insisto, hacia hermosa piñatas y restauraba santos de una manera sin igual, pero las figurillas de papel fueron su éxito.

Gutembert realizó un sinnúmero de figurillas de personajes villermosinos como fue la del “El Pájaro Azul”, quien vendía cancioneros por las calles vestido de azul; Don Nabor Córdoba “El Aguador” quien vendía agua de quinta en una carreta tirada de un caballo; “El Llavero” quien deambulaba por las calles gritando, llaves que vendo llaves que compro; “El Compone paraguas”; “El chelo Clever” repartidor de telegramas; “El Exprés”, repartidor más importante de periódicos; “El Tres Pelitos”, hombre cuervo que se bañaba en Plaza de Amas;  “Doña Cota” señora que pedía posadas en todas las casas y buscaba hijos imaginarios; “Paco Mona” Caballerango de Matías León; “Don Ángel Gil Hermida” el señor de los nacimientos de Zaragoza; “Doña Mará Pons” mujer de la vida galante; “Cupido” quien fumaba por la nariz y se hacía su zapatos con papel periódico; “Regulo y Madaleno” gemelos sordos y mudos; “María Garrido” “Chico Che”; “Jacobo Zablowdosky” y  “El Chombito” entre otros.

Personajes como Gutembert que nos dejan historia por sus artesanías son los que deberían de estar en lugares de importancia como lo hace la UJAT al tener parte de sus obras en exhibición de manera fija como un tributo a su dedicación y esfuerzo.

Hoy desde haya donde quiera que se encuentre Gut como se le conocía  el medio ha de estar orgulloso por su legado que dejo a los tabasqueños y en especial a los villermosinos donde vivirá para siempre.