Político carroñero
“La diferencia entre un ladrón y un político es que yo elijo a uno, y el otro me elije a mí”. Fabio Viltrakis Enrique Muñoz González cayuco7@hotmail.com Nicolás Bellizia Aboaf es de esos políticos que no deberían darles más oportunidades en espacios públicos; cuando no tiene cargos se muestra amable, atento, pero cuando tiene un […]
14 de octubre de 2014

“La diferencia entre un ladrón
y un político es que yo elijo
a uno, y el otro me elije a mí”.
Fabio Viltrakis

Enrique Muñoz González
cayuco7@hotmail.com

Nicolás Bellizia Aboaf es de esos políticos que no deberían darles más oportunidades en espacios públicos; cuando no tiene cargos se muestra amable, atento, pero cuando tiene un cargo, se transforma totalmente, es un déspota, arrogante, sinvergüenza; en este caso, perjudica el trabajo que actualmente viene realizando el PRI, por su pasado lleno de corrupción, representa lo peor del sistema político, razón por la cual no entendemos cómo fue nombrado delegado del Infonavit, pues acabará con el prestigio de esa institución.

Donde quiera que ha estado, Nicolás Bellizia, hay una estela de corrupción, las pruebas son suficientes, cuando fue alcalde, luego al ser legislador uso el fuero para hacer negocios y componendas, se fue de delegado de Sedesol a Coahuila, y salió corrido por pervertir los programas sociales con las elecciones realizadas el año pasado. A pesar de todas esas anomalías, le siguen dando cargos, con el Infonavit no dudamos lo vaya a hundir, nunca hace nada para destacar en forma positiva, pues se caracteriza por la mediocridad.

Todavía no se olvida cuando cerró los “Pantanos de Centla” para celebrar un bautizo, al más puro estilo de los narcos; siendo alcalde, las obras que hizo solamente fue comprar ranchos y residencias, no hizo nada por ese  municipio, a donde por cierto no llega, porque sabe no puede mirar a la cara a la gente, nunca les cumplió, usó el voto que le dieron y el cargo obtenido para amasar fortuna, al amparo de ser uno de los consentidos de Andrés Granier Melo. Hoy nadie le cree que vaya a cumplir con su nueva encomienda.

Después de salir prácticamente corrido de Coahuila, alguna componenda hizo para no ser castigado, porque después se empezó a circular la versión que ocuparía la delegación del ISSSTE en la entidad, como si no hubiera gente honesta y capaz para desempeñar ese cargo, al final de cuentas no llegó a ese cargo, pero si lo hizo en el Infonavit, donde no atiende a nadie; el personal dice que hay mucha diferencia con la anterior delegada Cristina Rubio, quien trataba con amabilidad lo mismo al personal, que a los derechohabientes.

Para algo es bueno Nicolás Bellizia, y es para transar y engañar a la gente, como buen simulador, procura verle ventaja económica a su favor a todo lo que hace. Hay memoria histórica sobre sus antecedentes, después de haber dejado el cargo burocrático que tenía en la Secretaría de la Contraloría, cuando era honrado y decente, para ir en busca de cargos de elección; como alcalde acabó con el presupuesto de Centla, siendo diputado local aprovechó el fuero para salvar sus cuentas públicas, contando con la protección de Andrés Granier.

Siendo diputado federal, Bellizia Aboaf aprovechó el cargo para que la Cámara de Diputados lo trasladara en ambulancia aérea desde Vancouver, Canadá, donde vacacionaba,  y por andar esquiando en la estación alpina de Whistler, sin tener la pericia suficiente, se accidentó, fracturándose ambas piernas; el sinvergüenza negó haya sufrido el percance estando de paseo, pese a haberse exhibido una factura por 17 mil dólares para hacer dicho traslado; las operaciones y rehabilitación, se las pagó el Congreso.

José Toshiro Noverola Peña, un panista de Centla ha señalado con insistencia las corruptelas de Bellizia Aboaf; una de las acusaciones, la zona donde van a construir el nuevo muelle de Frontera para las embarcaciones que van a trabajar para Pemex, en la zona de Carrillo margen izquierda desde San Román, son propiedades de los Bellizia, de Nicolás y de Pascual Bellizia, y finalmente ellos van a ser beneficiados por el tráfico de influencias, las cuales muy bien ha sabido aprovechar el ahora flamante delegado estatal del Infonavit.

El sistema político le ha dado mucho a Nicolás Bellizia, sin embargo, él no le ha dado nada a la gente por la que debe enfocar sus esfuerzos. Hay una red de complicidades para encubrirlo, y así continué medrando el presupuesto, en ese caso del Infonavit. Dice tener más aspiraciones políticas, sabe de esa manera es como podrá seguir amasando riquezas malhabidas; pertenece a esa legión de políticos que se sirven del cargo público, sin importarle las necesidades de la gente a la cual deben atender.

Como todo un político carroñero, aún no enterraban a Same Yabur Elías, en mayo del 2013, y Nicolás Bellizia Aboaf ya estaba pidiendo la delegación de Sedesol en Tabasco, dos meses después lo corrieron de ese cargo en Coahuila por corrupto. Esto refleja la clase de cucaracha de la que estamos hablando. No es de fiar, muy pronto tendremos noticias de los malos manejos que estará haciendo al frente del Infonavit, una noble institución, y merece un mejor destino.

La Piragua
El gobernador Arturo Núñez Jiménez encabezó la ceremonia de premiación del “XVI Gran Concurso Estatal de Artesanías”, donde conoció las diversas piezas que participaron en el certamen. Del mismo modo, refrendó el propósito de avanzar en la creación de un Centro Artesanal en Tabasco, servirá como punto de encuentro de los creadores, y a la vez de espacio de exhibición y comercialización de sus productos.

*** Tito Campos Piedra, diputado del PRD por Cunduacán, agredió a empujones ayer al transportista Antonio Rueda Martínez, frente a varios diputados en el marco de la inspección de obras en aquel municipio. No es la primera vez que está inmiscuido en pleitos, a principios de la legislatura fue demandado por su propio hijo, a quien agarró a golpes en la vía pública; en otra ocasión, quiso golpear a un fotógrafo por el hecho de haberle tomado una foto cuando pasaba por el lobby del Congreso con un pedazo de pastel en la mano. ¡Vaya tipo!

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