José Antonio Sifuentes, representante de éste organismo ante el órgano electoral, apremió a los diputados a tomar una determinación para darle al pueblo la certeza de que cuentan con un órgano transparente y confiable

Luis Ruiz Sandoval Frade
Rumbo Nuevo
Después que la semana pasada el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Tabasco (IEPCT) no logró el consenso para destituir por segunda vez al secretario ejecutivo Armando Xavier Maldonado, el representante ante este organismo por parte del Partido del Trabajo, José Antonio Sifuentes hizo un llamado a los congresistas para que “tomen la decisión que más conviene, destituir a todos los consejeros, ya que los actuales no generar confianza”.
En este sentido, el petista destacó que todo lo que hagan los consejeros, siempre será criticado hasta los vapulearan por su falta de capacidad, experiencia, pero sobre todo, que ya no representan la confianza que se debe tener en este organismo.
“Por lo cual, apremió a los diputados a que tomen una determinación y hagan una limpia completa al interior del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPCT) para darle al pueblo de Tabasco la certeza de que cuentan con un órgano transparente y confiable, ya que en estos momentos, no existe esta situación”.
Y sobre el caso de Armando Xavier Maldonado, quien de nueva cuenta venció a los consejeros, el representante petista ante este organismo electoral, consideró que el dictamen de la Contraloría estatal es más que contundente en razón de que se busca reestructurar la credibilidad de este organismos encargado de los procesos de elección local.
“En el momento que está evidenciado el mal desempeño del maestro Armando Maldonado, por todos los señalamientos que hicimos la oposición desde la etapa del desconocimiento y no aprobación de la Coalición de la izquierda, creo que desde ese momento el señor actuó con mala intención faltando al principio que le confiere su alto cargo de secretario ejecutivo del IEPC”, refirió.
Al respecto, mencionó que el haberlo restituido a su cargo es una muestra de que el caso está entrampado y sujeto a caprichos como a intereses políticos que no le dejan más opción al pueblo tabasqueño que esperar la resolución definitiva que emitirá el Congreso local.
“Una determinación sabia, que vaya acorde a la realidad democrática de Tabasco, que se vayan todos los consejeros por falta de confianza”.