La pandemia afectó severamente a la industria panificadora en la entidad, puesto que su dirigente, Karol Noé López Orta destacó que el 45 por ciento de sus agremiados, lamentablemente tuvieron que cerrar por la falta de capacidad económica, y ello, deriva, que más de tres mil personas fueron despedidas, porque no se les podía pagar.
En entrevista, el dirigente empresarial, aseguró que esta es una situación que se presenta a nivel nacional, derivado, a que, con más de cuatro meses, en algunos casos, de cierre, no hay recursos ahorrado para poder salir adelante.
Por ello, dijo que “son cerca de tres mil 500 empleos lo que ha perdido la industria panificadora en la entidad, ante el cierre del 45 por ciento de empresas adheridas a la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (CANAINPA)”, destacó.
Lamentó que un 45 por ciento de las empresas adheridas a la cámara han suspendido sus operaciones y han cerrado, y de ese porcentaje, por lo menos un 25 por ciento cerrará de manera definitiva por la situación económica que se vive y que no tienen de donde sacar recursos para pagar nóminas o rentas.
Y es que cerca de 756 establecimientos han cerrado en la entidad, mientras que en la capital, son 100 negocios adheridos a la CANAINPA los que han bajado sus cortinas.
“Del sector tenemos reportes que 756 panaderías han cerrado en todo el estado; de nuestro sector, son aproximadamente 100 panaderías afiliadas que han tenido que cerrar operaciones; de nuestros afiliados se han perdido 600 empleos directos, en cada panadería trabajan promedio, genera 5 empleos formales sin contar los cerca de 35 empleos indirectos que se generan lo que quiere decir, que son tres mil 500 empleos los que se han perdido en el estado en estos 4 meses” lamentó.
Luis Ruiz Sandoval Frade
Rumbo Nuevo