El oro, que no ofrece intereses, suma un alza de 24% este año, ante las bajas tasas de interés y las medidas de estímulo de bancos centrales para revivir la economía.
El oro alcanzó los mil 900 dólares por onza por primera vez desde 2011 debido a la tensión entre Estados Unidos y China que se observa más lastimada, así como por el impacto de la crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2, que causa la enfermedad covid-19. El oro al contado ganó 0.6 por ciento a mil 899.03 dólares la onza, tras tocar mil 905.99 dólares en la sesión, su máximo desde septiembre de 2011. Los futuros del oro en Estados Unidos subieron 0.4 por ciento a mil 896.90 dólares. En la más reciente crisis, China ordenó a Estados Unidos que cierre su consulado en Chengdu en represalia por la orden de clausura del consulado de Pekín en Texas.
El conflicto avivó la aversión al riesgo y envió el dólar a un piso de dos años. El constante aumento de los casos de covid-19, con un total de más de 4 millones de casos en Estados Unidos ayer y 15.58 millones de casos en todo el mundo, reforzaron aún más el atractivo de los lingotes
El oro, que no ofrece intereses, ha subido 24 por ciento este año, apuntalado por las bajas tasas de interés y las medidas de estímulo de los bancos centrales para revivir a sus economías, lo que beneficia al lingote que es visto como una cobertura contra la inflación y la depreciación de la moneda. La plata, en tanto, cayó 0.5 por ciento a 22.61 dólares la onza, pero ha subido 17 por ciento en la semana por expectativas de una recuperación industrial. Entre otros metales preciosos, el platino subió 1.2 por ciento a 915.77 dólares la onza y el paladio trepó 4.5 por ciento a 2 mil 220.61 dólares