El Gobierno comienza a negociar con la CNTE

Sandra Guzmán
El filósofo político inglés Bernard Crick dijo alguna vez: «La política es la conciliación, la solución del problema del orden que prefiere la conciliación a la violencia o coerción como medio efectivo de que los distintos intereses encuentren el grado de compromiso que mejor sirva a su interés común por la supervivencia… la política entraña cierta tolerancia a verdades divergentes y el reconocimiento de que la gobernación no sólo es posible, sino que se ejerce mejor cuando los intereses rivales se disputan en un foro abierto».

Una de las principales herramientas de la política es el diálogo y éste requiere el reconocimiento de que hay intereses divergentes que deben dirimirse en un foro abierto, franco y sin vetos previos, de lo contrario, se elimina la posibilidad de lograr compromisos mutuos y aniquilan la política.

La CNTE ha llevado al límite sus manifestaciones los últimos meses, al borde de la agresión hacia la autoridad de este país y de bloquear por completo los Estados de Oaxaca y Chiapas, así como una de las arterias principales en la ciudad de México durante dos días completos, francamente esto es injusto. Lamentablemente la disputa en torno a la Reforma Educativa ya provocó la pérdida de vidas humanas, ocho muertos en Asunción Nochixtlán, Oaxaca.

Además estas protestas magisteriales ya se han extendido a otras partes del territorio nacional e incluso en Estados donde aparentemente no había ninguna disidencia, como Nuevo León, donde ya lograron convocar a varios miles de manifestantes.

Todo esto ha resultado injusto para las personas que diario van a sus trabajos, injusto para los habitantes de esas ciudades que se han visto afectadas debido a la “locura” que el magisterio esta ocasionando en el país. Ellos exigen que se les escuche y se les respete pero, ¿en qué momento nos han respetado a aquellos que sí estamos de acuerdo con la reforma?

Ellos afirman que lo que buscaban principalmente es que se generara un diálogo para que se escucharan sus necesidades cuando en realidad lo único que esperan es que la reforma educativa sea completamente eliminada, ya que quieren seguir con sus actos de corrupción, en lugar de ayudar al progreso de la educación para los niños de este país. Simplemente en cada golpe de oportunidad la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) dice: “¿pues qué le cuesta al presidente echarse pa’ tras con la mentada reforma educativa?”.

Le cuesta si, y mucho. Esta reforma fue realizada con el único fin de limpiar el sistema educativo corrupto que existe en la nación, busca llenar de oportunidades a los niños de este país, que son quienes ayudarán con el desarrollo futuro. Por ello hay que tomar medidas “extremas” que de extremas no tienen un pelo, son simplemente lo más racionales posibles y en beneficio de todos, menos claro de los ladrones y oportunistas de la CNTE.

Para empezar y que de una vez les quede claro, el presidente Enrique Peña Nieto declaró: “Creo que la posición de unos es llevar a la derogación o abrogación de la reforma educativa, la cual, evidentemente no está en el ámbito del Ejecutivo, no corresponde al Ejecutivo tal condición. Al contrario, está para hacer valer la reforma educativa. No dejaremos de privilegiar el diálogo, hay posiciones a veces muy encontradas, con diferencias muy evidentes, pero creo que también tenemos que aproximar posiciones en ánimo y en aras de lograr una solución pacífica a este tema”.

Los maestros han exigido un diálogo de la peor manera posible, y muy a pesar de ello el Secretario de Educación Aurelio Nuño declaró: “Quiero reiterar que seremos más sensibles, estaremos más cercanos a las maestras y maestros de México y a su sindicato, para escuchar y dialogar y encontrar rutas que en el marco de la ley y en el respeto a la Constitución podamos fortalecer la reforma educativa”.

Por su parte Miguel A. Osorio Chong con la Secretaría de Gobernación, busca distender el conflicto magisterial y para ello intensificar las negociaciones a fin de lograr acuerdos concretos con el magisterio. “Se debe mantener siempre la posibilidad de dialogar. Esa posibilidad no debe de agotarse nunca”, dijo.

Osorio Chong explicó que el Congreso de la Unión tiene en sus manos la posibilidad de revisar la reforma educativa. “Lo que deba pasar en el Poder Legislativo, pues es responsabilidad de las cámaras del Congreso”, declaró. “El diálogo forma parte precisamente de la complejidad que se ha generado alrededor del tema y el diálogo lo que pretende es establecer una mesa en la que se puedan llegar a acuerdos concretos por parte de ambas partes”, indicó.

El titular de Gobernación, ha manifestado públicamente su disposición a dialogar, pero siempre bajo la premisa de que hay temas vedados y posiciones intransigentes, hasta hoy, el saldo es negativo para todos: los opositores han sufrido la violencia gubernamental con la pérdida de vidas humanas y el encarcelamiento de varios líderes y manifestantes; empero, el gobierno no ha logrado restaurar el orden.

Francamente espero que al entablar el diálogo se llegue a un punto medio con estos manifestantes, aunque a mi parecer la reforma educativa está muy bien estructurada, si todos nos tomáramos el tiempo de analizarla bien para comprenderla, seguro la apoyarían.

Espero que las cabezas de este país logren llegar a algún acuerdo y así se pueda limpiar al sistema de aquellos maestros que únicamente lo quieren continuar dañando por medio de la corrupción y que pronto nuestros niños mexicanos puedan disfrutar de los resultados de la reforma.