Los salones de manicura y parques para perros reabrieron el lunes al entrar la ciudad de Nueva York en una nueva fase de alivio de restricciones por el coronavirus, pero comer al interior de restaurantes se pospone indefinidamente para evitar un aumento en las infecciones.
El alcalde Bill de Blasio dijo que unas 50.000 personas más regresarán a trabajar al entrar la ciudad a la fase 3 de reapertura, que además de los salones de manicura incluye salones de tatuaje, bronceado al interior y deportes como básquetbol, voleibol y balonmano.
«Parecerá más verano otra vez porque hicimos todo este esfuerzo para llegar hasta aquí y ya no podemos aflojar», dijo De Blasio.