El gobernador electo, Arturo Núñez Jiménez, se deslindó categóricamente de haber dado su aval a la solicitud de crédito por 4 mil 130 millones de pesos que este martes el Gobierno del Estado solicitó al Congreso local. El mandatario electo precisó que  el hecho de que se le haya informado la víspera de esa solicitud “en ningún modo me vincula o compromete con esa decisión tomada, aunque agradezco la cortesía de hacerlo”.
“Ésta no es responsabilidad mía, no conozco ni las razones de fondo” que llevaron a las autoridades estatales- cuyas tareas y responsabilidades concluyen el 31 de Diciembre-, a hacer ese planteamiento a la Cámara de Diputados, enfatizó Núñez Jiménez al abundar sobre la reunión que sostuvo en sus oficinas  la noche del lunes con los secretarios de Gobierno, Rafael González Lastra y de Finanzas, José Manuel Saiz Pineda.
Refirió que en el encuentro se le dio una explicación esencial, escueta del préstamo que horas mas tarde  solicitarían formalmente al Congreso local. Ambos  funcionarios le informaron que básicamente se trataría de un endeudamiento para pagar deudas con el propósito cambiar las fechas de vencimiento de las mismas a largo plazo y para que el Gobierno del Estado dispusiera de liquidez.
La reunión tuvo una duración de aproximadamente 40 minutos, tiempo insuficiente para adentrarse en una problemática tan compleja como el endeudamiento del Estado. Núñez Jiménez, agregó que le llama la atención que pese a haber iniciado los acercamientos y reuniones directas con el Gobernador en funciones Andrés Granier Melo hace 55 días -el 19 de septiembre para ser exacto- en Palacio de Gobierno, sea horas antes de la presentación de esta solicitud de empréstito que se le informe de manera sintética.
El gobernador electo adelantó que luego de una primera revisión al documento presentado a los legisladores locales advierte que la solicitud de endeudamiento no es sólo para refinanciar deudas, sino que además se utilizará para realizar obras en materia de salud y educación.
Explicó que el decreto establece que de los 4 mil 130 millones de pesos, sólo 2 mil 116 millones de pesos se utilizarían para refinanciar adeudos y los otros 2 mil 14 millones se destinarán a financiar proyectos, que o bien están en desarrollo o se trata de proyectos nuevos, por lo que resulta extraño que a estas alturas de la administración saliente se piense que se pueden iniciar obras nuevas.
Núñez Jiménez exhortó a los  35 diputados integrantes del Congreso del Estado  a actuar con madurez y seriedad; «tienen en sus manos aprobar o no esta solicitud de endeudamiento, deben evaluarla en todos sus términos y decidir con todo sentido de responsabilidad pensando en Tabasco.”
De no ser  así, advirtió Núñez Jiménez,  los diputados tendrán que asumir las consecuencias de una mala decisión para el Estado, y discrepó de quienes señalan que la deuda pública de Tabasco es menor si se compara con la de otras entidades del país, pues “yo podría decir también que son menores a los adeudos de España y de Grecia, pero no es el caso que nos comparemos con otras realidades y contextos bien diferentes, sino con nuestra propia historia”.
El gobernador electo consideró que no se aprecian razones para que Tabasco presente los niveles de endeudamiento que en la actualidad registra, por lo que adelantó que el equipo de especialistas en finanzas que le apoya analizará este asunto y «en su oportunidad habremos de pronunciarnos más profundamente sobre el sentido y los alcances de este empréstito».
Finalmente, Arturo Núñez Jiménez envió un mensaje al pueblo de Tabasco: “Quiero ser muy transparente con la opinión pública y decirles que yo no tengo otro compromiso sino con Tabasco, que lo voy a honrar a plenitud a partir de que conforme a las disposiciones constitucionales y legales  me haga cargo de las responsabilidades inherentes a las condiciones de gobernador de Tabasco”.