Minipoemario Lunar: REGULAR II
Heberto Taracena Ruiz Espectáculo de espectáculos, el fútbol todo lo acapara junto con Maradona, ¿y las drogas? La publicidad nos asuela a tanto matraqueo sin medio tiempo. Terminamos todos vestidos de luto como lo haría el planeta. La Casa Rosada hoy es casa negra de contrastes. Los oídos no tienen ecos para otros árbitros que […]
27 de noviembre de 2020

Heberto Taracena Ruiz

Espectáculo de espectáculos,
el fútbol todo lo acapara
junto con Maradona,
¿y las drogas?

La publicidad nos asuela
a tanto matraqueo
sin medio tiempo.

Terminamos todos
vestidos de luto
como lo haría el planeta.

La Casa Rosada
hoy es casa negra
de contrastes.

Los oídos no tienen
ecos para otros árbitros
que no sean:
fútbol y Maradona.

Si Charles Baudelaire
fue poeta maldito
de excepcionales dotes,
¿alguno lo recuerda?

Si Maradona
fue jugador maldito
hoy día resulta
santificado
por medios delirantes.

Cómo desconocer
tan versátil destreza
para hacer del balón
su portería…

Nadie regatearía,
ahora que ha muerto,
sus aptitudes.

Porque no es un Dalí,
ni un da Vinci,
ni un Artur Rimbau
precoz;
Maradona envolvió
emociones
enloquecidas
como él mismo,
ambivalente:
mitad fútbol, mitad drogas.

Que como resultado
de la beatificación
por la muerte
que todo lo perdona,
bien sería que jóvenes
secundaran al ídolo
tan sólo en lo tocante
a su movilidad
dentro del área.
¿Por qué no?

Lo verdaderamente
repugnante
pudiera ser
fumar sus adicciones,
dizque con fines lúdicos…

Cunduacán, Tab., a 25 de noviembre de 2020

Compartir: