Heberto Taracena Ruiz
El hombre a quien se aplica
la sanción,
no reincide,
pues ella es preventiva
y salvaguarda
derechos…humanos.
Si la sanción es regla
que marca
irresponsabilidades
y desacatos,
nadie estará presto
a cambiar el trasero
por las buenas maneras.
Raíces de entuertos
calan hondas
en hogares
de éstas y otras
generaciones.
Desde que el crio supo
que con berrinches
su lenguaje ganaba
a los mayores
apáticos y simples,
aquellas respuestas
inmediatas
con un par de nalgadas,
quedaron obsoletas.
Y en el cuento el recuento
dobló la regla
en ninguneos,
por aquí, por allá.
El niño es hombre
y padre de familia
entonando
semejante estribillo.
De donde el ciudadano,
cientos de veces,
despierta
sólo con la sanción.
Ah, y ahora,
por menos en la crisis
pidamos sea efectiva,
sin titubeos;
caso contrario
la Covid 19
será nuestra sanción.
Cunduacán, Tab., a 24 de abril de 2020