Heberto Taracena Ruiz
A la Maestra
Egla Cornelio Landero
Secretaria de Educación.

Espíritus de la palabra
fueron Goethe, Victor Hugo,
Shakespeare, Cervantes
-entre otros-
por haber tocado el punto
de incorporarle soplo
universal,
en verso,
en prosa.

Palabra es continente,
pero el hombre
puede ser su habitante
y contenido.

Verbo que es la palabra
por antonomasia
no logra explayase
si no es
con la versatilidad
creativa del usuario.

Palabra
sin espíritu pleno
de quien la empeña,
es como biblioteca
sin lectores
mas o menos,
dijera Borges,
o simplemente,
deuda impagable.

Educación
es palabra
que no clama el arrimo
de adjetivos.
Hablar de educación
de calidad
o escuela digna
formaron pleonasmo
sin embargo aplaudido
por “el muy respetable”.

Así vienen girando
en la palabra pública
una serie de ruedas
a todos los niveles
“que sería prolijo enumerar”.

Ahora que si colgamos
nada mal al gobierno
tan premiosa faena…
…por mucho que éste hiciera
y por cuántos dineros
aplicara al espacio:
de no haber padres,
alumnos y vecinos
que la secunden,
más dañino será
que la pandemia…

Cunduacán, Tab., a 30 de agosto de 2020