Heberto Taracena Ruiz
A LA MAESTRA
EGLA CORNELIO LANDERO
SRIA. DE EDUCACIÓN

Educación y Crianza
se buscaron
y, queriendo-queriendo
encontraron…
¿lo que buscaban? si,
lo que buscaban
juntas por comprobarse
que educaban.

Entrambas recorrieron
el camino
delicado, a dos manos
y buen tino.

Destino no es final
si repensado
corrígese en presente
lo pasado.

Pasado que contiene
aciertos
pero también errores
encubiertos.

Hicieron de paciencia
su labor
común, pescando frutos
de puntual pescador.

Hubo días aciagos
inclementes.
Incompresibles
pero no dementes.

Paciencia y fe
se conjuntaron
y gotas de sudores
asperjaron.

Noches largas
en que se levantaban
a vigilar la senda
que plantaban.

La persistencia fue
de su divisa,
renovada impresión
de una sonrisa.

Ni maná ni milagros
les llovieron,
pero en ese tejido
entretejieron.

E hizo la pareja vocación
compartida
indisolublemente
de por vida:
¡Crianza y Educación!

Y en ello la excelencia
compartían
al par de que a la cima
llegarían.

Una con otra,
crianza y educación,
latieron con el mismo
corazón.

José Martí escribió
en vibrante esquela:
“Hombres recogerá
quien siembra escuela”.

Cunduacán, Tab., a 3 de agosto de 2020