A DON JORGE SÁENZ JURADO.
Heberto Taracena Ruiz
CLXXII
No hay renglones sin escribir,
caminos sin andar.
-En alguna otra parte lo escuchamos:
-Estos renglones.
-Estos caminos…
¡hum…!
CLXXIII
Todo está escrito
y pasado;
pero debemos seguir escribiendo,
recaminar las huellas,
sin punto de reposo.
CLXXXIV
La vida misma es
continuación de otras,
semejantes.
CLXXV
Algo por mínimo traemos
de quienes
estuvieron
con anterioridad.
CLXXVI
Paso que damos
da cuenta
de otros
pasos
previos a nuestros pasos.
CLXXXVII
Resonancias tienen ojos
y huellas oídos.
Estas líneas que lees
ya las habrás leído.
CLXXVIII
Pero si te no cansas
yo tampoco.
La luna
advertirá
de tropiezos
para seguir pasando
la vida
juntos…
Al dueto:
No hay renglones
sin escribir,
caminos sin andar.