Mascarriel
*AMLO, Sun Tzu, los priístas y el Arte de la guerra… política.*Tabasco: no hay arroz cocido… Mario IbarraDigamos que el Presidente López Obrador quiso ser generoso en la victoria.Dijo que los priístas mexiquenses, Enrique Peña Nieto y Alfredo del Mazo -primos ellos, para mayores señas-, se habían portado como demócratas, pues ambos se abstuvieron (ostensiblemente, […]
25 de septiembre de 2023

*AMLO, Sun Tzu, los priístas y el Arte de la guerra… política.
*Tabasco: no hay arroz cocido…

Mario Ibarra
Digamos que el Presidente López Obrador quiso ser generoso en la victoria.
Dijo que los priístas mexiquenses, Enrique Peña Nieto y Alfredo del Mazo -primos ellos, para mayores señas-, se habían portado como demócratas, pues ambos se abstuvieron (ostensiblemente, subrayemos) de “meter las manos” en sus respectivas elecciones: Peña Nieto en la presidencial del 2018 y del Mazo en la que acaba de verificarse en el Edomex.
Digamos tambien que la apreciación puede ser válida y justificada desde el punto de vista del hombre de Palacio, lo cual, a su entender, vale para premiar al auto exiliado en España, Peña Nieto, y a del Mazo con el diploma de “demócratas”.
AMLO, bonachonamente, le colocó a cada uno su estrellita de niños bien portados en la frente en la frente, y los dejó felices per sécula seculorum.
Órale: a gozar sin preocupación alguna de sus muy ‘dignas’, ‘dignísimas’ fortunas…

LOS 0TROS DATOS…
Pero hay otra óptica, otro prisma para evaluar y calificar el comportamiento de los mexiquenses.
Existen, como nos ha enseñado a decir el propio Presidente, “otros datos”.
Y de estos se desprende la convicción de que tanto Peña como su primo del Mazo se comportaron no como demócratas, sino como convenencieros.
Ambos arriaron banderas, ambos rindieron la plaza, ambos traicionaron a sus correligionarios y se traicionaron a sí mismos.
Ambos se acobardaron.
Ambos, para quienes sostienen esta apreciación, se ganaron el titulo no de demócratas, sino de Rajones.
Desde un año antes de la elección presidencial, Peña Nieto se dio por perdido.
Envió sus mensajes con la bandera blanca, dispuso para el PRI a un mal candidato, José Antonio Meade (muy buen funcionario por otro lado), le dio vuelta a la página de las elecciones y se abocó a preparar su exilio dorado en las Europas.
Se recordará para siempre que Peña Nieto no esperó hasta el 1 de diciembre de ese 2018 para traspasarle el poder a López Obrador: al día siguiente de la elección presidencial y del contundente resultado a favor de este, Peña Nieto sencillamente desapareció.
De manera fáctica, AMLO tuvo y ejerció el poder presidencial desde esas fechas.
Pero hay que ser justos: lo mismo hicieron Claudia Pavlovich en Sonora, Pedro Joaquín, en Quintano Roo, Quirino Ordaz en Sinaloa, Alejandro Murat en Oaxaca, y los gobernadores priístas en Hidalgo y en Colima: rendir la plaza.
Obvio, las fuerzas electorales del MoReNa arremetieron contra esos ex bastiones priístas con fuerza arrasadora, y asunto que terminó.
Podría argumentarse a favor de “ese hato de collones”, como los llama el priísta de cepa que me comparte esta versión, que lo que hicieron fue medirles el agua a los camotes.
Su consideración pudo ser así: “si me enfrento con AMLO y su MoReNa, le puedo dar batalla, y en una de esas hasta le puedo ganar, pero, si pierdo, que es lo más probable, no me la voy a acabar, la revancha de Palacio me hará pinole; entonces, para qué buscarles chiches a las culebras: señores del MoReNa, la plaza es suya”.
A cambio, todos recibieron sus respectivas recompensas…

SUN TZU…
Agreguemos por nuestra parte que cabe aquí recordar a Fernando Gutiérrez Barrios, quien decía que, “en política, todo problema que se resuelve con dinero sale barato”.
Vaya usted a saber que hizo AMLO para “convencer” a esos priístas de que estaban perdidos, y que lo mejor para ellos era recurrir a la fórmula infalible del “flojito y cooperando”.
Pero en todo esto no hay que escamotearle méritos al Presidente: lo dijo Sun Tzu en El arte de la Guerra: “El mejor general es aquel que hace huir al enemigo antes de entrar en la batalla…”
¿Y cómo le hace este general para obtener un triunfo tan económico, diríase gratuito?
Lo aclara Sun Tzu: “Urde el arte de la amenaza temible; el tigre ruge y sus enemigos huyen; así, el General victorioso antes de la batalla, le impone a su enemigo la certeza de su invencibilidad y la fatalidad de su derrota”.
Al parecer, AMLO se tiene bien leído al sabio chino…

TABASCO…
Tres elecciones son prioritarias para el MoReNa: la presidencial, la de CDMX y la de Tabasco.
No que Chiapas, Yucatán, Jalisco, Veracruz, Puebla, Guanajuato y Morelos tengan una importancia secundaria, no.
Pero la primacía política y la carga simbólica que para el cuatroteísmo contienen la elección presidencial, la de CDMX y la de Tabasco, las distingue de las demás.
La presidencial y la antigua Tenochtitlan por razones obvias, patentes e indiscutibles.
La de Tabasco por varias más: por ser la cuna del obradorismo y de su fundador.
Porque, en la tradición política atávica y en el imaginario popular, un Presidente no puede perder una elección en su entidad nativa.
Y porque el político más cercano a Obrador (dejemos a Claudia de lado: ella ya es candidata presidencial. Punto), es Adán Augusto López Hernández…

EL HERMANO…
No resulta ocioso recordar que AMLO ha dicho y redicho muchas veces esto: “Adán es mi hermano”.
(De paso: “La presidencia se le hereda al hijo, no al hermano” dijo el tlacuache Garizurrieta; y la hija es Claudia: hechura total de Andrés Manuel).
En el 2001 A.A. dejó al PRI y se unió a Obrador.
Y aquí el verbo ‘unir’ y el sustantivo ‘unión’ se manifiestan en su total fuerza significativa.
A partir del 2006, A.A. fue el hombre de Obrador en el sureste, coordinándole las campañas presidenciales del 2006, del 2012 y, en buena parte, del 2018.
Ya gobernador de Tabasco, AMLO se lo llevó a la Secretaría de Gobernación, desde la cual A.A. le rindió excelentes resultados.
Y sí fue precandidato, fue sin duda con la venia del Presidente.
Ahora es coordinador político de la campaña presidencial de Claudia…

EL ARROZ…
O sea; la candidatura a gobernador(a) de Tabasco presenta complejidades.
Hay tres opinadores de peso: el Presidente, la candidata presidencial, y el exgobernador, ex secretario de gobernación, coordinador de la campaña de Claudia y, posiblemente, próximo mandamás de la bancada morenista en el Senado: Adán Augusto.
Dependerá de AMLO a) imponer su opinión; b) priorizar la de Claudia; c) aceptar la de Adán y d) armonizar las 3 propuestas.
Por ello, me confían altas fuentes del MoReNa, nada hay decidido en Tabasco.
El Vo.Bo. a May en la mañanera no es garantía de nada. (Se le carga a este el ‘pecadillo’ de hacer acopio de recursos materiales y políticos en su paso por Bienestar, Sembrando Vida y Fonatur, para hacer trabajo proselitista desde hace 5 años).
La participación de Manuel Rodríguez, Mario Llergo, Raúl Ojeda, Mónica Fernández, Yolanda Osuna et al en la interna morenista de Tabasco no es fortuita, ni caprichosa ni, mucho menos ‘espontánea’.
Todo está fríamente calculado.
Para nada que en Tabasco el arroz ya está cocido y en el plato de Javier May. Para nada…

“En política siempre hay que recordar a Freud: ‘somos mucho más los orgasmos que no hemos tenido que los poquitos que sí hemos tenido’ ”.
R. R. Garza.

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