Mascarriel
*El “no se hagan bolas” de AMLO en el zócalo… *La muy apretada sucesión del MoReNa en Tabasco… Una cosa es indudable: el presidente López Obrador se está divirtiendo más que El Guasón: de lo más lindo y sin medida. El libreto que preparó para el proceso de la sucesión presidencial (un terreno en el […]
27 de marzo de 2023

*El “no se hagan bolas” de AMLO en el zócalo…
*La muy apretada sucesión del MoReNa en Tabasco…

Una cosa es indudable: el presidente López Obrador se está divirtiendo más que El Guasón: de lo más lindo y sin medida.
El libreto que preparó para el proceso de la sucesión presidencial (un terreno en el que su talento político se explaya) le está saliendo de campanillas: al pie de la letra y mejor incluso de lo que esperaba.
A diferencia de sus recientes antecesores, Calderón, Fox, Salinas de Gortari, de la Madrid y López Portillo -para no ir más lejos, el lio de la sucesión no le ha resultado estresante ni, mucho menos, angustioso, como a los mencionados.
¿Y Peña Nieto y Zedillo?, preguntará el lector atento.
Ah. No los incluimos en esta lista por una razón; Zedillo decidió pasar a la historia como el Presidente democratizador y pactó la transición presidencial poniéndole a Fox enfrente al peor candidato posible: Francisco Labastida; y Peña Nieto supo, 15 meses antes, que tenía perdida la elección presidencial del 2018; a partir de ese momento se puso en modo de flojito y cooperando, ganándose con creces su exilio dorado en la otrora ‘madre patria’.
Nomás viéndolo al Presidente Obrador, ya sea en sus mañaneras, ya en sus giras al referirse al tema, salta a la vista que no está padeciendo la presión del proceso sucesorio; al contrario: es evidente que lo disfruta…

LAS LECTURAS
Como disfrutó el macro evento conmemorativo de la expropiación petrolera con el zócalo atiborrado de bote en bote.
Parte de la satisfacción del Presidente resulta del éxito político/mediático/ temático de la magna concentración: en toda la semana pasada ese fue el tema dominante entre la clase política, la comentocracia y la tribuna en general.
“Que el Presidente dijo esto, que dijo aquello, que hay que leer entre líneas tal aseveración, que saludó efusivamente a Delfina Gómez pero no a Armando Guadiana, que…” En fin: lucubraciones, conjeturas, ‘interpretaciones’, deducciones, ‘lecturas’ de lo dicho por Obrador ante la multitudinaria emoción de su feligresía. Justo lo que él buscaba: tener a todo mundo hablando de lo que él quiere.
En nuestra pasada entrega apuntamos que tal acto masivo era un episodio más en el plan general que AMLO ha diseñado para ganar la madre de todas sus batallas: la elección presidencial del próximo año.
Y le resultó muy bien….

LA SUCESIÓN…
Lo del aniversario de la expropiación petrolera fue, digamos, la portada de la tanda; lo que AMLO buscaba era instruir, señalar, encauzar más claramente el proceso de la sucesión presidencial.
“Yo no me voy a equivocar” dijo.
Se refería al hecho de que Lázaro Cárdenas no pudo heredarle la presidencia a quien él quería, Francisco J. Mújica, sino que por presiones de ‘los conservadores’ decidió postular como candidato a Manuel Ávila Camacho.
Eso de que Cárdenas ‘se equivocó’ o de que ‘no pudo’ es una interpretación de AMLO y, como tal, totalmente respetable.
Pero hay otras opiniones, entre ellas la del propio Tata, quien en 1961 le declaró al periodista Roberto Blanco Moheno que había optado por Ávila Camacho por considerar que era una alternativa mejor ante el conocido radicalismo de Mújica.
Y bueno: débese considerar que Cárdenas fue el fundador del régimen del PRI-Gobierno, que gobernó a este país de 1940 al 2018.
(Los gobiernos de Fox y Calderón le hicieron al sistema lo que el viento a Juárez).
Que un régimen que duró casi cien años haya nacido de un error parece, en todo caso, discutible…

“NO SE HAGAN BOLAS…”
Pero lo que aquí importa es lo expresado por AMLO ante el zócalo atestado.
“Yo no me voy a equivocar” como se equivocó el presidente Cárdenas, enfatizó.
Desde luego, de inmediato se desgranó la feria de las interpretaciones, apoyados en las otras líneas maestras en el discurso de AMLO: “no se vale zigzaguear” y que la continuidad de la 4T está asegurada.
Al final del diluvio de análisis, traducciones, elucidaciones y glosas, algo quedó claro para todo mundo: sólo hay dos herederos para la presidencia: Adán Augusto y Claudia.
Esto así, porque, según el final consenso de comentócratas, políticos, analistas, académicos y villa melones, únicamente a Claudia y Adán Augusto se puede aplicar el retrato hablado que López Obrador hizo de su sucesor(a) en el zócalo amazacotado.
O sea, que el evento cumplió con el objetivo de AMLO: dejar claro para todos que ya ha decidido su sucesión: no se hagan bolas: son Claudia o Adán Augusto…

CANDIDATOS…
Ok. Claro está. ¿Y ahora?
La pelota está en la cancha de la oposición.
¡Pero la oposición ni cancha tiene!
O no se le ve hasta hoy.
Por ahí salió hace días Miguel Ángel Gurría diciendo ‘yo quiero’.
Y mire: sí se conformara un panel internacional de sinodales altamente reconocidos para designar como presidente de México al mexicano PROBADAMENTE más capacitado para el cargo, sin duda alguna elegirían a Gurría, por sobre todos los aspirantes del MoReNa y de la alianza opositora.
Secretario de Hacienda, de Relaciones Exteriores, 15 años al frente de la OCDE, economista mundialmente galardonado con capacidades políticas igualmente reconocidas.
El asunto es que las elecciones las ganan los candidatos, y Gurría sería un candidato oposicionista al que AMLO haría pomada en 3 mañaneras seguidas.
Entonces la pregunta es: ¿hay realmente cancha para la oposición rumbo al 2024?

EL ENTERRADOR…
Y, como respuesta al más puro estilo del Chapulín Colorado, salta el inenarrable ‘alito’ a la palestra.
Si el PRI estaba postrado y agonizante, su actual presidente, Alejandro Moreno, ha decidido oficiar como su enterrador designado.
Ya le dio en la torre a Osorio Chong, ya es dueño absoluto del PRI.
¿Qué se propone hacer con ese fiambre?
Ni en Edomex ni en Coahuila los gobernadores priístas tomaron en cuenta a ‘alito’ para enfrentar sus elecciones.
Sólo un lelo como Marko Cortes puede aventarse el tiro de aliarse con ‘alito’….
¿Cancha de la oposición…?

AIRES DEL TRÓPICO…
Por muchas razones, el proceso electoral estatal más interesante será el de Tabasco.
Ahí, a nivel estatal, se reproducen las tensiones, los movimientos telúricos y las batallas subterráneas que se dan a nivel nacional.
Tres aspirantes descollan: Jaime Lastra, Octavio Romero y Javier May.
Le cuento el próximo lunes con detalle…

“Mucha gente indignada y dolida puede confundir el ánimo vengativo con el ánimo justiciero”.
Enrique Cerna.

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