*El MAC del MoReNa, las remesas y su triunfo en las elecciones…
*Gubernaturas en la buchaca; extrañas “notas” tabasqueñas…
Mario Ibarra
Imposible evadir el tema.
Habíamonos propuesto salirnos de la reyerta electoral, dominada por la estridente propaganda de ambos bandos (insultos, calumnias, escupitajos, agresiones), para llamar la atención sobre las grandes urgencias del país: la salud, la seguridad, el empleo, la educación, la certidumbre, la economía -de la que depende la solución de todas.
Pero ya ve usted: se rompe una trabe, se precipita el metro al vacío, hay 26 muertos, casi un centenar de heridos y, al instante, las imágenes del desastre están en todos los diarios y noticieros del mundo.
Una tragedia.
Dolor, desesperación e impotencia en demasiados hogares.
Juicio sumario en automático y condena lapidaria en redes, medios y partidos contra autoridades y supuestos responsables.
Los infaltables buitres de la política (los panistas Federico Döring, Chistian von Roehdich y André Atayde en este caso) apareciendo en la zona del dolor buscando medrar, carroñeramente, con la tragedia.
Los dos principales aspirantes a la candidatura presidencial de MoReNa, Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard resultando directamente involucrados.
“No fue un incidente, fue un accidente que pudo y debió evitarse, se trata de una negligencia criminal…”, tal podría resumirse el juicio en redes, medios y eso que llamamos ´opinión pública´.
Sin duda se trata de un impacto imprevisto y de consecuencias imprevisibles (aún) para la 4T.
El asunto es insoslayable, pues…
LO QUE MAL EMPIEZA…
Carlos Puig resume inmejorablemente la historia:
“La construcción de la línea 12 del metro ha sido un desastre desde un principio:
“que si los trenes de un tipo que si mejor de este otro para ahorrarnos una lana…
“que si por esta ruta, no, mejor esta otra…
“que si todo subterráneo, no, mejor una parte por arriba y otra por abajo…
“que si tantas estaciones no, mejor dos menos…
“que si licitación directa para los trenes…
“que si otros que también hacen trenes ya se enojaron e impugnaron…
“que si apúrate a terminar para que inauguremos todos juntos y felices…
“que si abre pero poquito, porque la verdad no hemos acabado…
“que si nomás inaugurada, perdón, tenemos que reducir horarios para corregirla porque nos salió mal…
“que si hay desgaste prematuro…
“que si mejor ciérrala completa unos meses para ver qué onda…
“que si en el 2014 un consultor dijo que de plano todo estaba mal: ´trenes equivocados sobre vías equivocadas en la ruta equivocada…´
“que si se castiga a no sé cuántos funcionarios, unos con cárcel, otros con inhabilitaciones…”
Bien leído lo anterior, resulta nada menos que la crónica de un desastre anunciado.
La investigación más completa hasta ahora es la realizada por del CIDE y coordinada por Mauricio Dussauge.
Fue publicad a el 2018 y es imprescindible para cualquiera que necesite conocer el tema a fondo.
Claudia Sheinbaum y el comité -o lo que sea, que investigarán lo sucedido en Tláhuac, deben empezar por leer ese estudio del CIDE. Ahí está todo…
LA COMPLEJIDAD DE LO “SENCILLO…”
Y de ninguna manera podrán desdeñar o esquivar lo documentado en redes y en medios: desde octubre del 2019, vecinos de la zona y usuarios reportaron y exhibieron las fallas visibles en la columna y la trabe que colapsó.
A lo largo del 2020 no dejaron de subir a las redes más evidencias.
Empleados del metro reclamaron mantenimiento innumerables veces…
Pero ha menester esperar al diagnóstico especializado.
Lo que sí sabemos, es que tanto Claudia Sheinbaum como Marcelo Ebrard, están en un aprieto.
“Si el diagnóstico es que la tragedia se debió a una falla estructural, Marcelo podrá irse despidiendo de sus aspiraciones presidenciales”.
“Si en cambio, fue resultado de la falta de mantenimiento, lo mismo tendría que hacer Claudia”.
Puesto así, como la mayoría quiere verlo, parece un asunto sencillo: ¿Quién es el responsable, Marcelo o Claudia?
Pero no es así. No puede serlo. Más aún: será complicadísimo…
RESPONSABILIDAD Y CULPABILIDAD…
Porque ¿qué es lo que el peritaje buscará fincar?, ¿responsabilidad en los hechos o culpabilidad en las 26 muertes y los casi 100 heridos?
Porque no es lo mismo.
La responsabilidad puede recaer en un organismo, en un conjunto de personas, en un jefe de mantenimiento, en un cabo de guardia…
La culpabilidad es siempre personal y concreta. Y su castigo es penal si hay muertos.
La investigación debe remontarse hasta las decisiones sobre el diseño de la , su construcción, los materiales, las vías, los trenes; indagar la presunta responsabilidad de proyectistas, constructores, supervisores, administradores, funcionarios y gobernantes.
Y esto no es más que un esbozo de las complicaciones del asunto, un señalamiento de la complejidad enorme de los peritajes y la investigación.
Se trata de un asunto terriblemente embrollado y laberíntico, como se verá.
Columnas políticas y analistas adelantan que Tláhuac puede significar para la 4T un quiebre similar a lo que fueron y para el gobierno de Peña Nieto.
No adelantemos vísperas…
CONTROLANDO LA CRISIS…
Como todo gobierno digno de ese nombre, el de la 4T tiene su MAC (Manual para la Administración de Crisis).
Y la verdad sea dicha, son bastante duchos a la hora de aplicarlo.
Luis Antonio Espino sintetiza ese cabalmente:
1.Impedir que el hecho – ‘incidente’ o ‘accidente’- se convierta en crisis, controlar sus consecuencias, diluir responsabilidades…
2.Reforzar el discurso oficial…
3.Cuestionar la información de la prensa y las críticas sobre el suceso, deslegitimizar sus versiones…
4.Tomar decisiones políticas en función del ‘incidente’ o de la crisis, es decir: como táctica, “doblar la apuesta”, y, como estrategia, “escapar hacia adelante…”
5.Todo lo anterior encaminado a ‘sepultar el incidente’ o ‘dar por terminada la crisis…’
En suma: ganar tiempo, “echarle tierra al asunto” y dar por terminado el tema.
Imperativo subrayar: todos los gobiernos dignos de ese nombre, tienen su ; la diferencia entre ellos estriba en la capacidad y habilidad para operarlo con celeridad y eficacia.
Ejemplo elocuente: el gobierno de Peña Nieto fue patéticamente torpe, lerdo y babieca en la administración de los casos y .
Y de ahí p’al real se precipitó por el tobogán de la inepcia hasta ser devorado por sus propios hechos.
Al contrario, la 4T es sumamente eficaz al implementar su .
No adelantemos vísperas…
LO VITAL DE LAS REMESAS…
Como, de alguna manera, el Presidente las adelanta respecto a las remesas que envían nuestros paisanos desde USA.
El martes pasado, en la mañanera, el primer mandatario celebró que, una vez más, se hubiese superado el récord en el monto de remesas.
En marzo del 2020 la cifra fue de 4 mil 45 millones de dólares.
El mes pasado se incrementó a 4 mil 152 millones.
Desde luego, el Presidente agradeció a “nuestros paisanos migrantes por su apoyo”, que, dijo, ha sido determinante “para que no haya crisis de consumo, que la gente tenga para comprar lo básico, lo indispensable, esto nos ha ayudado a enfrentar la pandemia”, remató con el debido énfasis.
Y adelantó vísperas, informado que, para este mes de abril, se calcula que las remesas pueden sumar 4 mil 170 millones de dólares…
BENDITOS PAISANOS…
No es gratuito que el Presidente le haya dedicado buena parte de su mañanera del martes al asunto de las remesas.
Significan nada menos que nuestra principal fuente de divisas.
Nuestros paisanos nos dan más dólares que la Inversión Extranjera Directa (IED), más que el petróleo que exportamos y más que el sector turismo en su conjunto.
Para estados como Tlaxcala, Oaxaca, Nayarit, Guerrero, Zacatecas y Michoacán, las remesas representan el ¡10% del PIB estatal!
Para otros como Jalisco, Colima, Durango, Puebla, Veracruz, Hidalgo, Guanajuato, Aguascalientes y San Luis Potosí, las remesas aportan hasta un 5% de su PIB…
SUSTENTO PARA 35 MILLONES…
Fíjese: en los últimos 12 meses, nuestros paisanos han enviado 41 mil 832 millones de dólares. O sea: 850 mil millones de pesos más o menos.
(Para darnos una idea: es el equivalente a las ventas anuales de Soriana, Chedraui, Comercial Mexicana, Aurrerá y Wallmart).
Esos recursos se desparraman mayormente en zonas rurales y suburbanas entre alrededor de 7 millones de hogares, los cuales reciben en promedio 350 dólares, lo que quiere decir que, esos 7 millones de familias cuentan con ingresos de entre 7 mil y 14 pesos mensuales que les envían sus familiares en USA.
El 79% de esos hogares utilizan sus remesas en gasto corriente.
En otras palabras: de eso viven.
Para un 24%, ese dinero representa la mitad de sus ingresos totales.
En suma: 35 millones de mexicanos dependen total o parcialmente de las remesas que reciben de sus parientes…
(Fuente: Banxico y CEMLA) …
LA OTRA CARA DE LA HISTORIA…
No hay otra manera de decirlo: en el grado arriba expuesto, la economía mexicana depende de esas remesas.
Nada más pensemos que, de repente, cesaran.
Imposible imaginarlo.
Ahora mal: en ningún momento debemos olvidar que los 30 millones de compatriotas que viven en Estados Unidos y que enviaron en los últimos 12 meses casi 42 mil millones de dólares, fueron expulsados de su país por la necesidad, la falta de oportunidades, la violencia, la inseguridad, la desesperación incluso.
Sin embargo, del 2008 al 2018 fue mayor el número de mexicanos que regresaron a residir en su terruño que los que emigraron al norte: por cada 600 mil que se iban, 800 mil paisanos regresaban definitivamente.
Esa tendencia se ha revertido en los últimos 2 años: el número de compatriotas que intentan cruzar la frontera en busca de trabajo, solos o con sus familias, es el doble de los que regresan por su propia voluntad.
El mes pasado, la patrulla fronteriza detuvo y regresó a 70 mil mexicanos que intentaron cruzar la frontera en busca de trabajo.
Suman 550 mil repatriados en los últimos 12 meses.
Son 550 mil historias particulares de necesidad, pobreza y padecimientos; de riesgos y peligros asumidos con esperanzas, y que se trocan en sueños frustrados cuando caen en manos de la patrulla fronteriza…
Si, a los paisanos que logran quedarse del otro lado, hay que agradecerles siempre, como hace el Presidente, su coraje, su valor, su capacidad, su lealtad y su amor a México.
Pero nunca olvidemos que están allá porque aquí, en su casa, no tenían ni siquiera para comer…
Si: 42 mil millones de dólares en los últimos 12 meses; al precio de esa historia que ya dura 75 años…
GANARÁ MORENA…
Y a todo esto ¿cómo vamos?
A 25 días de las elecciones más grandes de nuestra historia, la foto que nos presenta la suma de encuestas del pasado sábado, nos sigue mostrando un panorama inestable.
Aunque algo se puede adelantar con la casi certeza de que por ahí andará el asunto.
De una manera u otra, el MoReNa se erigirá como indiscutible vencedor.
En las 12 elecciones para gobernador, el partido de AMLO sólo pone en juego una de ellas: Baja California Sur.
Las otras son actualmente gobernadas por el PAN y el PRI.
El MoReNa les arrebatará a esos partidos los gobiernos de Baja California, Colima, Nayarit, Sinaloa, Zacatecas y Tlaxcala. Ahí ya ganó.
Muy probablemente, se quedará también con Guerrero y Michoacán. Ya van 8. Como se quiera ver, eso es ganar.
La oposición tiene ventaja al parecer definitiva en Querétaro, Chihuahua, Nuevo León, Baja California Sur y Campeche.
El Verde, la Alianza y el MoReNa pelean voto por voto San Luis Potosí.
O sea: de 14 gobernaturas en disputa, el MoReNa conquistaría 8. Eso es ser Ganador.
Para la cámara de diputados, según la suma de encuestas referida, los morenos tendrían asegurada, si la elección hubiese sido ayer, la mayoría simple: la mitad más uno. Ganadores.
Eso sí: no arrasarán como hace tres años.
Al margen de que en estos 25 días pueden darse virajes importantes en el ánimo de los votantes. Sobre todo, porque hay un 30% de indecisos…
AIRES DEL TRÓPICO…
De repente, nuestros corresponsales en Tabasco se nos ponen medio sibilinos.
El reportero H. Grant, nos envía como “nota” una foto. En ella, aparecen el gobernador Adán Augusto acompañado “por uno de sus más fieles secretarios” (así: literal), un tal señor Palomera. Ambos aparecen, solitarios, en medio de una carretera no menos solitaria. El pie de foto dice así: “El gobernador y Palomera, secretario, sin “el platanero”; “¿se les olvidó invitarlo o es mensaje?”.
Y luego, al pie de otra foto similar: “recorrido por el distribuidor vial Universidad; ¿no gustó la solución del retorno al fallido empate de la rampa?”
Con todo respeto a nuestro corresponsal ¡qué nota es esta! Nuestros lectores en Tabasco (que los tenemos), no esperan de nosotros comunicación cifrada, sino información precisa, concisa y maciza. Por favor, señores corresponsales, más profesionalismo, si no es mucho pedir…
“¿Desde cuándo hay que estar de acuerdo con alguien para defenderlo de la injusticia?”
Lillian Hellman.
