La herencia de Don Leandro
“Nada resulta más atractivo en un hombre que su cortesía, su paciencia y su tolerancia”. Cicerón Enrique Muñoz González cayuco7@hotmail.com Vaya que fue muy grata y placentera la charla que ayer sostuvimos periodistas de la mesa “Rodolfo González Maza” con el ex gobernador Leandro Rovirosa Wade, en su domicilio de la ciudad de Méjico para […]
18 de octubre de 2012

“Nada resulta más atractivo en
un hombre que su cortesía,
su paciencia y su tolerancia”.
Cicerón

Enrique Muñoz González
cayuco7@hotmail.com

Vaya que fue muy grata y placentera la charla que ayer sostuvimos periodistas de la mesa “Rodolfo González Maza” con el ex gobernador Leandro Rovirosa Wade, en su domicilio de la ciudad de Méjico para hablar de todo un poco, aprender de sus vivencias y su visión sobre el futuro del estado con Arturo Núñez, como gobernador.

A don Leandro, lo encontramos de buen humor, jovial, emocionado por la noticia de que su nieto, Gerardo Gaudiano, diputado federal, había sido nombrado presidente de la Comisión de Asuntos Hidráulicos en el Congreso de la Unión, un tema dominado por el ex gobernador a la perfección, por su formación profesional.

Puntuales a la cita en su casa de Bosques de Las Lomas, nos atendió don Leandro Rovirosa, recordando los tiempos en cuando fue gobernador, hace ya 3 décadas, mencionando que existen buenos augurios, pues Arturo Núñez podrá hacer un buen gobierno, tiene una ventaja, conoce bien el estado y sus necesidades.

Aunque está lejos del terruño, sin lugar a dudas nos demostró se mantiene enterado de todo cuanto ocurre en Tabasco, al grado de manifestar al estado le hace falta de todo, pero no deja de reconocer, con Núñez Jiménez en el próximo gobierno las cosas deben ser mejor para todos, por el historial de servicios que lo distinguen, cumplirá bien.

En otro punto de la plática, el ingeniero Rovirosa, expresó el orgullo que siente al ver a su nieto, Gerardo Gaudiano, como diputado federal, y haya decidido hacer con méritos propios una carrera política, confesando, en dos ocasiones él quiso ser legislador, pero le pedían disciplina, porque el espacio estaba reservado para otras personas, y nunca le llegó esa oportunidad.

Dentro de sus anécdotas, comenta cuando su nieto ya estudiaba la carrera de Ciencias Políticas en la Universidad Iberoamericana, el hoy joven legislador prefirió caminar mejor desde la izquierda, pues es ahí donde encajan sus ideales y proyectos.

Es entonces cuando don Leandro narra que lo lleva con Andrés López Obrador, –de quien ayer mencionamos, recibió su primera oportunidad en la política en el gobierno del ingeniero Rovirosa con el proyecto de los camellones chontales–, y ahí va caminando, paso a paso, para dejar de ser una promesa en la política tabasqueña, y convertirse en una realidad.

Dice esperar mucho de su nieto, es a través de él como está trascendiendo en la historia y en el tiempo, porque el ingeniero Rovirosa, con la visión que tuvo en su tiempo, logró transformar el rostro de Tabasco, dejó huella y ahora por medio de Gerardo se cristalizan los sueños de seguir aportando lo mejor por la tierra que lo vio nacer y a la quien le ha dado todo, desde su profesión de ingeniero hidráulico hasta su pasión que es la política.

El ingeniero Leandro Rovirosa tiene una lucidez enorme, comentó varios aspectos de su llegada a Tabasco como candidato al gobierno en 1976. En su gobierno se recuerda que impulsó la construcción de edificios públicos, Talleres de Artes Gráficas y Archivos del Estado, una Casa de la Justicia para agencias del Ministerio Público, Juzgados.

También la sede del Tribunal Superior de Justicia; el C.I.C.O.M. Museo Arqueológico Carlos Pellicer, Teatro Esperanza Iris; Casas de la cultura en muchos de los municipios así como campos de béisbol con alumbrado y una Ciudad Deportiva en Cunduacán, por mencionar algunas de las obras realizadas en el sexenio que gobernó.

De trato amigable y generoso en su interés por hacer comprender las cosas que ha vivido. Se emociona cuando platica de todos aquellos recuerdos. Fue una plática agradable, una mañana llena de anécdotas, de recuerdos que hicieron del ex gobernador un momento entrañable, pues siempre está atento a lo que sucede en Tabasco.

Luego de escucharlo atentamente por varias horas, estamos convencidos la mejor herencia que deja en los tabasqueños, es su obra como gobernador, su prestigio como ingeniero hidráulico, y ahora el aprendizaje a su nieto Gerardo Gaudiano, que toma la estafeta para seguir llevando en alto el apellido Rovirosa. Don Leandro Rovirosa extraña Tabasco, recuerda con cariño y nostalgia la tierra que lo vio nacer.

La Piragua
En otros temas. Si ustedes creían que estaba desaparecido, pues no es así, Chucho Alí se anda dando la gran vida con Adrián Hernández Balboa, hospedados en el hotel Intercontinental de Polanco. Chucho busca el PRI y Adrián el municipio de Centro.

Por cierto, se nota Chucho y Adrián se quedaron con una derrota electoral, pero con las alforjas llenas de dinero, pues cada habitación sencilla del Intercontinental cuesta 5 mil pesos, y Chucho tiene rentada una suite.

Pobres priistas, no tienen ni para el aguinaldo, pero el candidato perdedor a la gubernatura se da súper lujos como un verdadero jeque. Aunque peores cosas se verán.

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