“La Choco” vuelve a Ventaneando
La conductora Jimena Pérez, conocida como “La Choco” regresó a México, luego de un año de residenciarse en España para el tratamiento de su hijo menor, Iñaki Sarmiento, quien padece de Trastorno Específico del Lenguaje. El pequeño que tiene cinco años recibe terapia en España acompañado de toda su familia, quienes han hecho de todo […]
16 de octubre de 2020

La conductora Jimena Pérez, conocida como “La Choco” regresó a México, luego de un año de residenciarse en España para el tratamiento de su hijo menor, Iñaki Sarmiento, quien padece de Trastorno Específico del Lenguaje.

El pequeño que tiene cinco años recibe terapia en España acompañado de toda su familia, quienes han hecho de todo para la evolución del niño.
“La Choco” regresó, además, para incorporarse como conductora del programa de espectáculo Ventaneando, en el que habló de cómo ha sido el proceso con su hijo.
“Estamos intentando todo tipo de tratamientos y ahora vamos a empezar con una nueva terapia que se llama ABA, que en realidad es la única terapia aprobada o avalada por la Organización Mundial de la Salud para niños con autismo.
Jimena explicó de qué se trata el tratamiento: “Es una terapia que a mucha gente le parece invasiva porque son muchas horas por semana y tienes que tener a los niños en terapia. Se da generalmente en casa y es una terapia conductual en la que ven por qué el niño se comporta de tal manera”, aseguró.
La conductora explicó que a través del tratamiento se busca que el niño sea independiente. “Ni siquiera los neurólogos se ponen de acuerdo. Unos te dicen: ‘Tiene autismo’ y otros de dicen que no. Si nos quedamos esperando a que nos den un diagnóstico no haces nada”.
Además, Jimena habló de las dificultades que vivieron durante la pandemia en su estadía en España.
“Después de mes y medio empezó a tener crisis. Hacía coraje y se empezaba a pegar en la cadera y nos dimos cuenta un día bañándolo y dijimos ‘Esto no es normal’. Después aprobaron que los niños que tuvieran un problema neurológico podían salir, pero ahí te enfrentas a la sociedad. A Rafa e Iñaki les gritaban hasta de lo que se iban a morir. Incluso, en dos ocasiones llegó una patrulla y Rafa les enseñó la carta de la terapeuta”.

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