Los caprichos de un viejo lobo

Humberto Iduarte
humbertoiduarte49@gmail.com
Después de que Comité Ejecutivo Nacional del partido de Morena, y por claras instrucciones del dirigente interino de ese instituto político, Alfonso Ramírez Cuellar se ha decidido separar de sus cargos a ocho delegados estatales del país, entre ellos el de Tabasco el químico César Burelo Burelo.

Pero hay un trámite que cumplir de acuerdo con lo que obliga la Ley General de Partidos Políticos, a que éste debe de continuar hasta que esté un sustituto en esa posición.

Todo esto que hemos visto ha sido debido a los intereses de un viejo lobo, un grillo político que sabe perfectamente como es el manejo de un partido ante las venideras elecciones del 2021.

Estos intereses a los que nos referimos representan capital político y financiero sobre todo a favor del generoso conductor político que analiza quienes pueden los mejores candidatos para ponerlos en disputa en la futura elección. O lo que es lo mismo, las posibles ventas de candidaturas a como logró aprender desde sus inicios en el partido tricolor.

Claro que por lógica entrará un sustituto que estará ocupando ese espacio, que, por consecuencia, entregará el cargo al elegido tal como lo marca el resolutivo.

Aquí lo que observamos son situaciones muy claras, ejemplo es la actitud del actual encargado del partido en la entidad quien contrario a lo que muchos apostaban de como tomaría este resolutivo del INE, su respuesta fue muy vertical, muy a favor de la unidad de los morenistas en Tabasco.

Esto puede verse como una verdadera bofetada con guante blanco al inductor de estas medidas que apuestan más a la ruptura por intereses de grupo que a su neo partido.

Lo que exhibió el actual dirigente al acatar este resolutivo, mostró que ese partido debe de estar por encima de cualquier conflicto interno y al contrario debe de estar más unido más que nunca para enfrentar a la oposición que ha amenazado a unirse y entrar en las elecciones del 2021 en una gran alianza para regresar al poder.

Morena deberá cohesionar sus fuerzas en una sola dirección y lo que se hoy se observa es todo lo contrario.

En cuento al procedimiento legal de la notificación se destaca que la notificación del INE, con fecha del 1 de julio, no fue firmada ni fue remitida al Comité Ejecutivo Estatal.

Fue un oficio general emitido por el INE, y elaborado a petición del CEN de Morena, en el que se indica que las funciones de las delegaciones en ocho estados, incluyendo Tabasco, dejaron de tener ese carácter. Y sí: la terminación del encargo es legal de acuerdo con el Estatuto partidista.

Nos aclaran que no obstante a ello, el INE precisa que conforme al artículo 25, numeral I, inciso f de la Ley General de Partidos Políticos, es obligación de los delegados de Jalisco, Quintana Roo, Sinaloa, Tabasco y Tlaxcala mantener en funcionamiento sus órganos estatutarios. Esto significa que Cesar Burelo, por ministerio de ley, seguirá al frente del partido hasta que llegue el sustituto.

Como lo ha venido haciendo desde que asumió el cargo.

César Burelo ha dicho que su interés es el de “seguir privilegiando la resolución de las diferencias con propuestas y buenas ideas, en aras de continuar fortaleciendo el proyecto nacional de la Cuarta Transformación”.

La actitud del delegado César Burelo envió con esta actitud un mensaje claro a la dirigencia nacional de que no se confrontará con ellos, ni tratará de buscar aferrarse a esa posición.

Quizá el viejo lobo piense quizá que ya ganó, pero esto solo es una partida en el ajedrez político nacional. Todavía este juego está entero, hay mucho en juego y en la dirigencia nacional nada está escrito.

Quedan en el tablero por jugar Mario Delgado, Alejandro Rojas, Bertha Luján y Yeidckol Polevnsky. El viejo lobo solo tiene una apuesta de tres. Pero… ¿estará seguro a su apuesta?