La Agenda
Tabasco, peor que nunca en contagios Humberto Iduarte humbertoiduarte49@gmail.com Tocar el tema de la pandemia en mi estado es algo que sobrepasa a la imaginación del más inteligente, y lo decimos porque hay infinidad de opiniones de expertos que nos deja perplejos. Y no crea que exagero lo que digo, solo hay que buscar en […]
25 de junio de 2020

Tabasco, peor que nunca en contagios

Humberto Iduarte
humbertoiduarte49@gmail.com
Tocar el tema de la pandemia en mi estado es algo que sobrepasa a la imaginación del más inteligente, y lo decimos porque hay infinidad de opiniones de expertos que nos deja perplejos.
Y no crea que exagero lo que digo, solo hay que buscar en las redes sociales la cantidad de médicos “expertos” que opinan de como curar el coronavirus. Muchos de ellos tienen la solución para curar esta letal enfermedad, resultan más inteligentes que los más estudiosos que buscan la vacuna para controlar esta grave enfermedad.

Son opiniones que circulan de alto riesgo y que puede afectar la salud gravemente, no obstante, se siguen multiplicando el reenvío de estos videos sin control alguno.

Otros más, expresan su contrarias opinión acerca de las cifras y el control que lleva la Secretaría de Salud federal y muchos de ellos la desmienten. El problema es no dan datos duros o certificados que puedan avalar sus opiniones, al contrario, son notas especulativas que a nada llevan.

Otro problema que va de la mano con esto es que mezclan la enfermedad con la política y los intereses de cada uno o cada grupo y esto produce un gran descontrol de veracidad de esta información.

Mientras esta situación prevalezca a como se ve, y que está totalmente fuera de control, se está causando daños muy serios en las mentes de una población temerosa e insegura. Población que está ávida de conocer la realidad de lo que sucede en este país.

Sobre esto mi sugerencia será siempre en creer en quien trae toda la información de lo que sucede en todo México, y no es fácil debido a los datos diarios que reciben en un país extenso territorialmente con una población que rebasa los 120 millones de habitantes. No podemos pasar por alto que México está por si no lo sabía, dentro de uno de los cinco países con mayor desigualdad social. Ridículamente vemos como lo comparan en contagios y letalidad hasta con países europeos.

No hay más que estar atento a la información oficial y dejar de lado tantas opiniones que solamente nos han dañado y descontrolado mentalmente.

En Tabasco, esta pandemia ha hecho su nicho, conoce bien nuestras debilidades y por tal razón, las cifras alarmantes y escandalosas que nos sitúan en lugares vergonzosos comparativamente en todo México.

Por lo general hay muchos tabasqueños que somos muy dados a encontrar culpables de nuestros actos. Casi nunca reconocemos nuestras culpas y esto ahora es lo que está pasando.

Para simplificar lo que aquí pasa, solo hay que dividir que existimos tres tipos de personas en mi entidad; las que se guardan en casa responsablemente, las que salen a la calle por necesidad de trabajar cuidándose por temor al contagio, y las de mayor riesgo, que son aquellas que no creen ni toman en cuenta esta letal enfermedad. Esos son los menos, afortunadamente, pero que por su conducta irresponsable acrecientan las fuentes de contagios.

En este último sector es donde está el problema… y la difusión del Codiv-19 en la entidad.

¿De qué forma puede un gobierno concientizar a su población para que se cuide? Me escucharé mal, pero creo que no hay forma de poder hacerlo debido al alto grado de falta de educación y la 0 conducta de cada uno de ellos. Esto que se pretende es casi una labor imposible.

No hay formas ni remedios que puedan sensibilizar a quienes no les importa lo que les pase. Están renuentes y hasta les causa gracia desobedecer, aunque su propia vida esté de por medio.

No quiero ser pesimista, mucho menos alarmista, pero Tabasco va a bajar esta curva de contagio cuando aquellos que hoy se burlan, les toque pagar con su propia vida su cerrazón, o les toque saber de qué algún familiar cercano falleció. Mientras tanto, dudo mucho que entiendan.

Hoy, la tarea titánica que hace el sector salud y los que atienden a los enfermos de esta infección, no se les pase que son personas humanas que sienten, temen y se cansan, y otros que pagan con su propia vida.

¿Hasta cuándo cree usted que soportarán?
¡Piénselo! Si conoce a algunos que formen parte del grupo tres, oriéntelo, haga entrar en razón. Esto servirá mucho.

Compartir: