Y mañana llega!

Humberto Iduarte
humbertoiduarte49@gmail.com
Mañana es un día especial para Tabasco…La llegada del presidente Enrique Peña Nieto reviste un hecho interesante por las expectativas que según él y su gabinete puedan levantar en esta tierra.

Hay que decirle al presidente (de sólo una parte de México) que en Tabasco, muchos con un poco de dignidad, ya no creemos en su palabra.

Hace poco llegó y nos ofreció alguna esperanza por estar en primer lugar en desempleo y eso gracias a la falta de previsión de su gobierno y sus reformas, y tratándonos como niños castigados, hasta que se le antojó, viene al estado a darnos lo que nos prometió en ese entonces. Una dádiva de dinero para empleos emergentes. Sólo eso, y si hay algunos anuncios de beneficios, pues hasta no ver no creer.

¿Será que sus flamantes asesores no le dicen la verdad al Presidente de lo que sucede y pensamos aquí?.

¿Será que no le informan que ya estamos hartos de la desconsideración y de la descortesía del Centro?.

¿Será que olvida de que este estado ha sido en gran parte sostén de este país durante décadas y que gracias a él todavía se mantiene?.

¿Será que piensa que no nos hemos dado cuenta que Tabasco es un estado que no quiere en lo absoluto?.

¿Será que no toma en cuenta como los tabasqueños observamos con coraje como cumple sus compromisos de campaña en otros estados con obra multimillonarias y aquí nunca las cumplió?.

¿Será que piensa que haber recortado el presupuesto de la CONAGUA no nos expone ante una catástrofe?.

¿Será que todavía no la han informado cuantos delegados federales hay en Tabasco que siguen haciendo sinvergüenzada y media con los dineros de la Federación y que no cumplen?.

¿A qué viene entonces Señor Presidente?.

Vendrá ahora si a cumplir con su obligación de gobernar para todos, y no solo para sus amigos gobernadores?.

Eso quisiéramos saber.
Porque a inaugurar autopistas, libramientos carreteros, pasos a desniveles, hospitales de alta especialidad, escuelas, a eso, seguramente no viene… y a como están las cosas, ni vendrá!

Chiapas un polvorín
Cerca de aquí, en el vecino estado de Chiapas se está viviendo una cruda realidad, quizás, la más espinosa y dificultosa en estos últimos años.

Para la gran mayoría de los chiapanecos, el gobierno que dice tener aún el gobernador Manuel Velasco Coello, al que poco a poco se le escapa de sus manos por no resolver los problemas, por no escuchar, ni tampoco cumplir compromisos, está a punto de detonarle por su grave incapacidad en el ejercicio del poder.

Sus sueños de llegar a base de propaganda a la presidencia lo hizo despilfarrar decenas de millones de pesos del erario en una excesiva publicidad que va más allá del ámbito local. Sus publicidad, engañosa por cierto, está presente en casi todos los medios escritos y electrónicos del país. El gasto fue tremendo. Hoy en ese estado ha crecido la pobreza extrema, sus finanzas están en crisis, y la deuda ha crecido monstruosamente.

La actuación del niño verde en esta comedia le está resultando muy cara a los chiapanecos, y este sueño se le va a convertir pronto en su peor pesadilla.

Comentan que en Chiapas se vive un ejercicio del poder muy distinto a lo establecido. En él hay un solo poder: el Ejecutivo, nadie más.

La división de poderes comentan, es sólo una simulación, que ahí no se respeta la representatividad de los otros dos poderes, mucho menos la libertad de ejercerse sin la amenaza del estado.

Hay negocios que este personaje mandata para que se hagan y usa la intimidación que es uno de sus fuertes para «convencer»; pero lo más grave es que cuenta con la bendición y aprobación del presidente del Tribunal Judicial del Estado para hacer sus cosas.

El gobernador Velasco en estos últimos meses ha perdido el control de su estado, sus finanzas están muy deterioradas, hay incumplimientos de pagos, y se dice que ya no le salen las cuentas.

Chiapas comienza a arder y eso lo sabe Manuel Velasco Coello, la opacidad de su gobierno ya se ve en cada rincón de esa entidad y el fantasma de un Granierato lo acecha, el pésimo ejercicio gubernamental hace vislumbrar que le siga los pasos… y la senda. ¿Seguirá confiado en que tendrá un espaldarazo?…