Intervención
Nueva época César Armando Javier Pérez cesarjavier143@hotmail.com La semana pasada, Rumbo Nuevo, El Diario de la Vida Tabasqueña, en un magistral suplemento histórico sobre el petróleo en nuestro estado, titulaba que con el inicio de la construcción de la refinería comenzaba una nueva era para la entidad, pero a ocho días de esa publicación, nos […]
10 de junio de 2019

Nueva época

César Armando Javier Pérez
cesarjavier143@hotmail.com
La semana pasada, Rumbo Nuevo, El Diario de la Vida Tabasqueña, en un magistral suplemento histórico sobre el petróleo en nuestro estado, titulaba que con el inicio de la construcción de la refinería comenzaba una nueva era para la entidad, pero a ocho días de esa publicación, nos atrevemos a decir que efectivamente estamos viviendo una nueva era a nivel nacional.

La llegada de nuevos personajes y una fuerza política, que no desconocida, mucho menos novata, sí vanguardista en esto del arte de gobernar.

Los tiempos han cambiado, y como lo podemos ver todos los días, nuestros gobernantes de todos los niveles están haciendo las cosas diferentes, a tal grado que nos hacen soñar con que, ahora sí, las cosas irán mucho mejor.

Evaristo, el percusor
Mucho ruido fue el que se hizo con el desistimiento del alcalde de Centro, Evaristo Hernández Cruz, de vender los terrenos en donde actualmente se encuentra el ayuntamiento. El clamor ciudadano hizo que el edil recapacitara y atendiera lo que el pueblo exigía.

Muchos lo vieron como una derrota política, pero es todo lo contrario. El alcalde capitalino ve esta oportunidad para, en primer lugar, limpiar su imagen un poco manchada con las disputas que tuvo con un par de ciudadanos que se mostraron en contra de su forma de gobernar.

Evaristo reconoce, aunque no en público, que fue un error enfrentarse a la ciudadanía, pero está a tiempo de recomponer el rumbo y así lo demostró, al hacerle caso al pueblo y frenar la polémica compra-venta del ayuntamiento, con lo que demuestra que está comprometido con el municipio, y que para nada es un improvisado. Es un político de grandes tablas, que sabe lo que tiene que hacer, por eso los resultados de su gobierno ya están a la vista, aunque muchos insistan en lo contrario.

Adán, cumple sus tiempos
Otro gran ejemplo es el del gobernador Adán Augusto López Hernández, que demuestra que es uno de esos raros personajes que aún existen en nuestro estado, que respeta a carta cabal su palabra empeñada.

El gobernador fue muy cuestionado al arranque de su administración por la ratificación del secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Jorge Aguirre Carbajal. Sabía que era un riesgo que tenía que correr, ante la presunción del ahora ex secretario que se excusaba diciendo que no le daban el apoyo que necesitaba, pero que daría resultados a la brevedad posible.

Con el paso de los meses su incapacidad se fue haciendo evidente, y la gente se empezó a desesperar, a pedirle al gobernador que interviniera, y una vez que se cumplieron los plazos pactados, el mandatario actuó, cumpliendo su compromiso con el pueblo y el cambio ya se realizó, con la esperanza y la promesa de que, ahora sí, la inseguridad debe ir a la baja.

El pueblo habló y el gobernador, igual que el alcalde, escuchó y actuó, ¿cuándo íbamos a ver eso?

El triunfo de Obrador
Dicen por ahí que a veces se gana perdiendo, pero yo, personalmente, no lo veo así.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador acaba de tener un triunfo importantísimo en materia económica al impedir que Estados Unidos implementara el cobro de aranceles a todos los productos mexicanos, en venganza de la llegada masiva de inmigrantes centroamericanos a la frontera sur de su país, en parte con anuencia del gobierno mexicano.

Donald Trump nos tuvo en jacque por varios días. El peso cayó estrepitosamente. El dólar se vendía a más de 21 pesos. Las calificadoras nos mandaban casi a la ruina… pero el gobierno de México supo actuar a tiempo, enmendar la plana y lograr que el presidente norteamericano reculara en sus amenazas.

Ciertamente el gobierno de López Obrador tuvo que ceder. Recular en su apoyo a los migrantes, aquellos a los que se les prometió, incluso, darles trabajo en nuestro país. Pero como lo ha dicho el mismo presidente, no podemos ser “candil de la calle”.

El pueblo de México está primero. López Obrador confirma. Una vez más, que somos su prioridad, y con el dolor del alma, a frenar la avalancha de inmigrantes.

Repito: ¿Cuándo íbamos a tener gobernantes que se preocuparan por su pueblo?

Comandados por el presidente López Obrador, Adán Augusto López Hernández y Evaristo Hernández Cruz, están cambiando la historia, un historia que pinta para tener, por fin, un final feliz. Deseamos que así sea…

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