Kiev, Ucrania
Agencias
Un gigantesco incendio en un depósito de petróleo cerca de Kiev, que causó la muerte de un civil y la desaparición de tres bomberos, obligó a evacuar a los civiles de la zona cubierta por una espesa humareda negra.
La catástrofe se debió a una violación de las normas de seguridad o a un «sabotaje», indicaron las autoridades que descartaron la hipótesis de un atentado terrorista.
Las llamas gigantescas amenazaban con propagar el incendio a un aeropuerto militar cercano al depósito.
Un empleado del depósito murió y otras 14 personas resultaron heridas, según un primer balance del ministro del Interior ucraniano, Arsen Avakov.
Previamente, en un tuit, Avakov había hablado de «varios bomberos muertos», pero finalmente mencionó la desaparición de tres bomberos.
Un helicóptero sobrevolaba el sitio de la catástrofe, donde varios depósitos de combustible seguían quemándose, observó un periodista de la AFP presente en el lugar.
Los bomberos luchaban contra el fuego sin poder dominarlo y temían que las llamas alcancen otro depósito petrolero vecino.
Si el fuego se propaga a esa instalación «todo estará perdido», dijo un coronel.
Unos mil 500 soldados de la Guardia Nacional tomaron posición alrededor del sitio y socorristas de tres regiones vecinas fueron desplazadas al lugar.
«Se decidió evacuar a la gente de la zona en un radio de 2 km y preparar la evacuación de la zona en un radio de 10 km si el incendio se propaga», indicó el jefe del servicio de situaciones de urgencia, Mykola Chechtkine, que agregó que existía el riesgo de «nuevas explosiones».
Las autoridades también tomaban medidas para impedir que el fuego se propague a una zona militar «situada a 50 metros de la zona invadida por el fuego», agregó.