Roma, Italia
Agencias
El finlandés Mikko Hirvonen se hizo con la victoria en el rally de Italia, duodécima y penúltima cita de la temporada, por delante del ruso Evgeny Novikov (Ford), y del estonio Ott Tanak (Ford), un resultado que le convierte en subcampeón del mundial.
El piloto escandinavo sólo tuvo que mantenerse sobre la pista y llegar a meta sin afrontar demasiados riesgos en su conducción puesto que el primer triunfo lo tenía prácticamente asegurado desde el viernes, día en el que abandonaron el resto de pilotos oficiales.
Este el primer triunfo válido desde que llegó a Citroen, marca con la que completa su primera temporada, puesto que siempre tuvo el papel de segundo piloto del francés Sebastien Loeb, ya campeón del mundo, y en Portugal, aunque fue el más rápido sobre las pistas, los jueces le desposeyeron del triunfo por irregularidades en su vehículo.
Hirvonen tuvo hoy un día tranquilo ya que solo había dos tramos de apenas ocho kilómetros de distancia cada uno, una jornada final de trámite en la que las posiciones no cambiaron con respecto a ayer. Los organizadores plantearon un tramo de más de cincuenta kilómetros para hoy, pero finalmente les fue imposible realizarlo.
Con esta distancia tan corta y teniendo en cuenta que por detrás había dos pilotos con vehículos de igual categoría aunque rendimiento inferior y que desde el viernes se mostraban satisfechos con sus puestos de podio solo tuvo que mantenerse sobre la pista.
Ni siquiera intentó marcar el mejor tiempo en el último tramo, el denominado Power Stage en el que se bonifica con puntos a los tres mejores tiempos. Su obligación hoy era llegar a meta, puesto que así se hacía con su cuarto subcampeonato de la especialidad.