Ronnie ha mutado en Robaldinho y en el entorno del club crecen aquellos que quieren su salida en junio de 2015, si no puede ser antes

México, DF
Agencias
Seis meses después de ser presentado con todos los honores en Querétaro, Ronaldinho ha cambiado los elogios por críticas. Ronnie ha mutado en Robaldinho y en el entorno del club crecen aquellos que quieren su salida en junio de 2015, si no puede ser antes, y que ni por asomo quieren que cumpla su contrato, que acaba en junio de 2016. Nadie cree, de hecho, que vaya a cumplirlo.
Ronaldinho fue castigado por su entrenador, Víctor Manuel Vucetich, por saltarse un entrenamiento y no fue citado para el último partido que los Gallos Blancos perdieron ante el Toluca (1-0) para derrumbarse hasta la penúltima posición liguera tras 10 jornadas, quince puntos por detrás del líder Tijuana y en la peor crisis que se recuerda.
En diciembre de 2014, cuando el brasileño retrasó tres semanas su incorporación a la pretemporada del Querétaro, ya se rumoreó su posible salida del club y se dio por hecho que su hermano Roberto de Assis estaba sondeando el mercado de la MLS con vistas a su fichaje por alguno de los clubs punteros de la competición.
Dichas negociaciones, sin embargo, no se concretaron y tanto Ronaldinho como el Querétaro proclamaron a mediados de enero su intención de permanecer juntos hasta junio de 2016… Pero desde entonces la figura del Gaúcho ha caído en barrena.
El brasileño, que recuperó su magia en un Atlético Mineiro al que lideró hacia la conquista de la Copa Libertadores en 2013, ha vuelto a mostrar su imagen más fiestera y menos profesional en México, hasta el punto que en los Gallos Blancos se multiplican las voces favorables a su marcha, en las redes sociales aumenta el descontento entre una hinchada que le ha rebautizado con ese humillante Robaldinho y los medios de comunicación coinciden en que su salida está próxima.