Guayabazo
La odisea del sufrimiento Manuel García Javier guayabazo@hotmail.com Unos, desde las diez de la noche del día anterior; otros, desde las primeras horas de la madrugada, y los más, al despertar el alba, llegaron a su destino donde poco a poco fueron haciendo su democrática cola. El óvalo de la Ciudad Deportiva, se vio atestado […]
21 de diciembre de 2020

La odisea del sufrimiento

Manuel García Javier
guayabazo@hotmail.com
Unos, desde las diez de la noche del día anterior; otros, desde las primeras horas de la madrugada, y los más, al despertar el alba, llegaron a su destino donde poco a poco fueron haciendo su democrática cola. El óvalo de la Ciudad Deportiva, se vio atestado de discapacitados, de la tercera edad, jóvenes y hasta niños, familias que sin guardar la llamada sana distancia para librarse de un contagio de ‘Covid-19’, paulatinamente iban avanzando en la serpentina que daba vueltas y vueltas hasta llegar al pórtico principal donde les entregarían 10 mil pesos en efectivo.

Son miles de damnificados por las inundaciones del pasado mes de noviembre que resistieron agua, aire, sol y algunos hasta hambre y sed, pues no llevaron nada de efectivo. Ahí pasaron la noche, sentados en el suelo, en sillas, en lo que podían, era más la fuerza de la necesidad que el sufrimiento adverso. Vendedores ambulantes de productos ‘chatarra’, refrescos embotellados, sandwich, panuchos, en fin, algo con qué mitigar el hambre, hicieron su ‘agosto’ con su venta, mientras que llegaban los servidores de la nación con el dinero.

Elementos de la Guardia Nacional, apoyados con personal de la Secretaría de Seguridad Pública, patrullaban el área, en tanto que la gente de Bienestar orientaba inútilmente a guardar sana distancia, colocarse correctamente el cubre bocas, porque había necios que sólo lo cargaban colgado en el cuello; incluso hubo hasta personal de limpieza para embolsar basura que algunos inconscientes tiraban.

Por fin, alrededor de las 11:00 de la mañana, y después de más de 12 horas de larga y tediosa espera, dio inicio el reparto. Bien desayunados y con renovado espíritu de servicio, empleados y empleadas de la Secretaría de Bienestar, apoyadas por personal del DIF Tabasco, solícitos comenzaron a dar acceso, de cinco en cinco, a la gente que con un respiro de satisfacción expresaban al cruzar la valla metálica y el pesado portón: ¡Por fin adentro!.

Una vez pasado el primer filtro, la papelería del beneficiario es revisada (dos copias de su credencial de elector con fotografía, el original de la misma y el talón con folio que le fue entregado al ser censado en su domicilio) para después ser conducido a un improvisado local de 30 sillas.

En este segundo filtro, el favorecido es atendido por empleados de Bienestar, a quienes se le entrega el folio y el original de la credencial de elector, en una espera de aproximadamente 30 minutos, en tanto personal del área de cómputo, localizan e imprimen la respectiva orden de pago debidamente foliada, número de transferencia y con ID único que de inmediato la entregan al beneficiario… Se recibe original de la misma y firmada ante ellos, preguntan si puede caminar o en caso contrario ahí tienen personal para conducirlos en silla de ruedas hacia el área de pago, esperar el cobro y trasladarlo hacia la salida donde sus familiares lo esperan.

Al beneficiario le queda copia de la orden de pago con la cual tendrán derecho a recibir posteriormente, de manos de personal militar, un paquete de seis enseres domésticos conteniendo: un refrigerador, una estufa, un ventilador, licuadora, juego de sartenes y colchón matrimonial.

Los comentarios a esta odisea del sufrimiento salen sobrando. Algunos, los que tienen posibilidades económicas, dicen que es una limosna lopezobradorista la que se está dando, pero para el grueso de la población “es una bendición de Dios”; y quizá por ello imploran al divino creador, “cuide a su presidente” que siempre los ha apoyado.

Bueno o malo, el beneficio ya fue entregado, aunque haya sido calificado como asunto electorero, porque hubo personas que expresaron determinantes que votarán de nuevo a favor del proyecto de Andrés Manuel López Obrador. Y es que, en fechas pretéritas, ya había gente que prometía voto de castigo contra la 4T. Sin embargo, de nuevo en Tabasco, al menos 200 mil votos ya están garantizados a favor de Morena. Así es esto.

Por cierto, que al que si le llovió en su milpa fue al dirigente panista, Pedro Gabriel Hidalgo Cáceres, pues se le detectó cobrando sus diez mil pesos de damnificado. El hecho es que tiene todo el derecho de cobrarlo, pero el asunto es que en días anteriores fue uno de los que lanzaron fuerte crítica al mencionado apoyo. El caso es que el ‘panucho’ ya se embolsó lo que cobró de su casa en la ranchería Río Viejo tercera sección, pero resulta que también tiene casa en zona crítica de Macuspana, o sea que puede cobrar otros diez, acompañado de dos juegos de enseres… No puej. Es todo, nos leemos en la próxima. Sean felices.

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