Guayabazo
Puerto de Frontera… una esperanza Manuel García Javier guayabazo@hotmail.com Aquél puerto pesquero que en los años 60s del siglo pasado fue escogido por el productor Luis Alcoriza para que todo el mundo lo conociera en una historia emocionante que los artistas Julio Aldama y Dacia González, así como Tito Junco, Amanda del Llano, Eric del […]
10 de febrero de 2020

Puerto de Frontera… una esperanza

Manuel García Javier
guayabazo@hotmail.com
Aquél puerto pesquero que en los años 60s del siglo pasado fue escogido por el productor Luis Alcoriza para que todo el mundo lo conociera en una historia emocionante que los artistas Julio Aldama y Dacia González, así como Tito Junco, Amanda del Llano, Eric del Castillo, Alfredo Varela, Noé Murayama e Irma Serrano, entre otros, protagonizaran con la película ‘Tiburoneros’, está a punto de recibir lo que en justicia merece. El puerto de Frontera, situado en la costa tabasqueña, durante más de un siglo ha sido objeto de promesas de mandatarios para la construcción de sus escolleras.

Su han resistido engaños tras engaños de decenas de autoridades que prometen y prometen su modernización y, obviamente, el dragado de la bocana, pero todo ha sido inútil… se han burlado del pueblo frontereño.

Primero, allá por el año 2010, cuando Francisco I. Madero llegó al puerto en su campaña presidencial, los centlecos le expresaron la problemática del desazolve del río para solucionar el problema del poco calado de la desembocadura al mar. Fue cumplido pero no hubo consecución de otros gobiernos.

Sin embargo, hubo auge con la exportación del plátano roatán; incluso compañías bananeras centroamericanas utilizaron a Frontera como puerto estratégico. Más tarde, vino la decadencia de la producción platanera, la ‘sigatoka’ hizo estragos del llamado ‘oro verde’ y emigraron las empresas bananeras.

En abril de 1952, históricamente el periódico frontereño ‘El Alacrán’, publicó como nota principal un análisis del periodista Armando Pérez Chan titulada: ‘Cuando un tabasqueño sea presidente, tendremos escolleras’, y narra que ‘El obrero de la patria’, Miguel Alemán Valdés, consideró ingenuos a los tabasqueños porque les prometió la construcción de las escolleras, pero no cumplió. Compañías, como la ‘Christian and Nielsen de México, S.A.’, se fueron definitivamente de la ciudad, dejando a medias los trabajos de las defensas del muelle.

Dice Pérez Chán, férreo luchador en favor de la construcción de esas obras, dijo en esos días que ‘Frontera ha visto fracasar sus más profundos deseos, pero aún le quedan las esperanzas que algún día serán una realidad, pero esto será cuando un hijo de Tabasco llegue a ocupar el sillón presidencial, de lo contrario veremos bailar a los negritos, así como el desastre económico de nuestro pueblo’.

Así fue pasando el tiempo, y el pueblo con frustradas esperanzas.Algunos gobernantes de Tabasco, secundados por los alcaldes, se atrevieron a decir: “Por fin, llegó la hora de Centla”; otros afirmaron más tarde: “Ahora sí, le llegó la hora a los frontereños”; sólo el solitario ex edil Napoleón Rodríguez Suárez, continuó machaca y machaca sobre el tema en ruedas de prensa, pero sus peticiones clamaban en el desierto.

Por ejemplo, Vicente Fox, con desvergüenza dio por concluidos los trabajos de construcción de escolleras y dragado de Frontera. Felipe Calderón, envió dragas de la naval, pero sólo para engañar porque no hicieron nada. Y lo mismo sucedió con el mentiroso Enrique Peña Nieto que anunció y publicó un Plan Maestro de Desarrollo Portuario de Frontera, por cierto que el proyecto mostraba un moderno muelle y una ciudad como de ‘caramelo’, pero todo quedó en eso… en proyecto.

El recinto portuario de Frontera abarca una superficie de 5.3 hectáreas de las cuales son aprovechables las comprendidas entre los muelles pesquero (1.2 hectáreas) y fiscal (1.6 hectáreas), debido a que se encuentra limitado por el área urbana e invasiones diversas por construcciones ajenas a la actividad.

El puerto cuenta con una bodega de tránsito de 1,500 m2 de área total y 1,050 m2 de área útil, localizada en el muelle fiscal, la cual, según la Administración Portuaria Integral en 1913, se encuentra en condiciones óptimas de operación.

El muelle y las instalaciones de Pesquera Tabasqueña han dejado de prestar servicio a la pesca, habiendo sido transferidas a la API, por el Gobierno del Estado.

Los embarcaderos flotantes de la Quinta Zona Naval, además de su uso propio, se utilizan eventualmente para los recorridos de turismo ecológico hacia el área natural protegida de los Pantanos de Centla.

Fue hasta el 2 de febrero del 2020, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador llegó a Frontera acompañado del secretario de Marina, almirante José Rafael Ojeda Durán y del gobernador Adán Augusto López Hernández a cumplir sus promesas de campaña, mediante la Ceremonia de Abanderamiento de las dragas ‘Montebello ADR-18’ y ‘Morelos ADR-19’ para iniciar de inmediato los trabajos, sueño acariciado de ese pueblo pesquero que al parecer rompe la maldición de las escolleras; “Frontera volverá a ser la estación marítima comercial más importante del Golfo de México”, dice el gobernador López Hernández; “Amor con amor se paga. Ya es la hora del sureste, vamos ahora a equilibrar México para que haya inversiones en el sur-sureste de nuestro país”, reiteró el presidente.

Y mientras esperamos que los designios de don Armando Pérez Chan para Frontera se cumplan, continuamos abrigando la esperanza de que a ese puerto, que un día se llamó ‘Álvaro Obregón’, llegue la justicia social que tanto anhela. Es todo, nos leemos en la próxima.

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