Guayabazo
Enfermo de revanchismo, inquina y resentimiento Manuel García Javier guayabazo@hotmail.com – guayabazo@gmail.com Con una sola declaración, el candidato del PRD a la alcaldía de Centro, Manuel Andrade Díaz, sepultó a su homólogo aspirante del Revolucionario Institucional, Andrés Granier Melo y con ello todo lo que pudo haber ganado en la gira del dirigente nacional tricolor, […]
21 de mayo de 2021

Enfermo de revanchismo, inquina y resentimiento

Manuel García Javier
guayabazo@hotmail.com – guayabazo@gmail.com
Con una sola declaración, el candidato del PRD a la alcaldía de Centro, Manuel Andrade Díaz, sepultó a su homólogo aspirante del Revolucionario Institucional, Andrés Granier Melo y con ello todo lo que pudo haber ganado en la gira del dirigente nacional tricolor, Alejandro Moreno Cárdenas, que sólo vino a quejarse de la falta de dinero en su partido:

“Aquí hay tres tipos de campañas: 1.- los que quieren construirse una imagen que no tienen y que está conformada por ideas ajenas; 2.- que lo que quieren es tratar de lavar su imagen porque está dañada por la corrupción y mal gobierno; y la tercera de los que tenemos que conservar nuestra buena imagen”.

Y efectivamente, en cuanto al intento de Granier de lavar su imagen dañada por la corrupción y mal gobierno, él mismo en diversas entrevistas lo ha expresado: más que el deseo de participar para bienestar de la población de Centro, su principal objetivo es la decisión de ‘limpiar su nombre, su moral y el honor de su familia, por lo que pasó, por venganza política y el acto vil de quien lo suplió en la Gubernatura de Tabasco, Arturo Núñez Jiménez”. Con ello, queda perfectamente claro que su prioridad es venganza, revancha, represalia, incluso egoísmo, porque claramente se ve que busca el ‘ojo por ojo’, la inquina que envenena y que intoxica en base a el resentimiento.

El peligro de todo esto –según artículo de Luis Muiño de la revista ‘Muy Interesante’–, es que el rencor acumulado durante mucho tiempo es uno de los factores que pueden desencadenar una depresión. Se sabe que la ira estancada constituye uno de los pilares básicos de esa enfermedad, y debido a sus prejuicios cognitivos, los pacientes que la padecen desarrollan una gran cantidad de resentimiento contra los demás –porque sus fantasías justicieras nunca se ven realizadas– y contra sí mismos por la impotencia que esto les genera.

Su espera inútil de resarcimiento los lleva a pensar demasiado en lo que sucedió, en cómo ocurrió, en quién tuvo la culpa, en lo injusto que fue… Se detienen en el “debería haber ocurrido de otra manera” y eso les impide avanzar hacia una actitud más adaptativa del tipo “es así y tengo que asimilarlo”. Su enfado acumulado acaba convirtiéndose en un sentimiento de indefensión que se encuentra en la base de muchas depresiones y trastornos. En síntesis, podría el candidato del PRI a la alcaldía centreca, padecer un stress postraumático que se convierte en un detonante de diversas enfermedades.

Y es que el individuo ha vivido un acontecimiento que se encuentra fuera del marco habitual de las experiencias humanas y que lo angustia; por ejemplo, amenaza grave para la propia vida o integridad física, amenaza o daño para los hijos, el cónyuge u otros parientes cercanos y amigos, destrucción súbita del hogar, y sentimos que gran parte de ello fue lo sufrido por el hoy candidato.

Lo peor de todo esto es que no es sólo el padre, sino también el hijo que hoy busca la revancha para la venganza. En fin, ahí queda eso.

Continuará en ‘resistencia civil’
A pesar de su lento caminar, aunado a la discapacidad que durante muchos años ha llevado a cuestas, la anciana de 78 años aún hace la limpieza, barre el patio y lava ropa. Ella vive sola, su esposo ya falleció y sus hijos ya se casaron; en su pequeña sala, un refrigerador, una estufa y un televisor (que le obsequió el gobierno de la 4T con motivo de la inundación) son sus únicos acompañantes.

Doña Célida Gallegos Camacho, oriunda de la ranchería Barrancas y Guanal, Tintillo, Centro, Tabasco, no fue incluida en el convenio que el Gobierno del Estado y la Comisión Federal de Electricidad signaron el año pasado para ponerse al día en el pago a la paraestatal. Ello, debido a que el 31 de enero de este año se dio por concluido el convenio y el ‘Adiós a tu deuda’, no pudo concluirse por la pandemia de ‘Covid-19’ que aún azota la entidad. Y fue hasta esta semana, después de las respectivas vacunas, que se acercó a las oficinas de la CFE, donde le comunicaron que tendrá que pagar 5 mil pesos y la realización de un nuevo contrato.

Sólo alcanzó a decirles que, pues, ni modo, continuará en la resistencia civil que inició con el hoy presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pues ya no existe convenio, su servicio fue cancelado y no hay nada legal que pueda ampararla. A su domicilio no le llegan recibos de luz desde hace 4 años; además, ¿Qué va a saber ella de convenios entre el Gobierno y la Comisión Federal de Electricidad?, ¿de que su domicilio forma parte de las 600 mil casas tabasqueñas que estaban en resistencia civil?, de que tenía derecho a la Tarifa 1F homologada con subsidio durante todo el año… Triste historia, increíble pero cierto.

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