El gobierno de coalición del primer ministro italiano, Mario Draghi, corrió el riesgo de colapsar después de que el Movimiento 5 Estrellas, uno de sus miembros, no apoyó una cuestión de confianza parlamentaria que incluía medidas para compensar la crisis del coste de la vida.
Justo después de la votación, Draghi se dirigió al Palacio del Quirinal en Roma para reunirse con el presidente Sergio Mattarella, el árbitro supremo en la política italiana. Ambos conversaron durante casi una hora. Draghi, de 74 años, regresó a su despacho sin comentar lo que habían hablado.