El presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) Antonio Quirarte destacó que ante el “gasolinazo” se depreció en un 12 por ciento de manera aproximada el costo de las obras que se presentaron el año pasado, por ello solicitan de manera formal al Gobierno de Tabasco una mesa de diálogo “para poder ajustar este incremento en el costo de las obras, pues evidentemente de seguir con el mismo precio, nos afectará económicamente”.

Luis Ruiz Sandoval Frade
Rumbo Nuevo
En entrevista, el dirigente empresarial solicitó al gobierno del estado establecer mesas de trabajo para analizar el impacto del alza de los precios del combustible en la obra pública, sobre todo en los proyectos cuyos contratos fueron firmados el año pasado y que serán realizados en este 2017.
“Al ser presupuestadas” con precios de 2016, antes del alza del dólar y el incremento en las gasolinas, los costos se incrementaron este año con los ajustes a esas dos variables, además del que tuvieron otros insumos de la construcción, como el acero”.
“Tenemos que analizar primero los precios, porque si tenías contemplado hacer un kilómetro y medio de caminos a precios del año pasado, con el alza de las gasolinas ese camino que tenías proyectado se va a reducir 12 por ciento”, ejemplificó el líder empresarial.
Y es que, refirió, de acuerdo con los análisis hechos por la CMIC, tan solo el aumento en los precios de las gasolinas generará un incremento en los costos de las obras de entre 12 y 15 por ciento, es decir, será más cara que lo proyectado inicialmente.
En muchos casos, advirtió, los constructores no podrán absorber esos incrementos, por lo que habrá obras inconclusas.
Destacó, sin embargo, que la Ley de Obra Pública incluye un mecanismo denominado “ajuste de precios o escalamiento”, el cual debe ser utilizado por los constructores para actualizar los costos o presupuestos.