Escenarios
Adaptarse: no hay de otra Juan Ochoa Vidal juan_ochoa45@hotmail.com La pandemia vino no solo a hacernos daño, sino también a urgirnos a emplear recursos tecnológicos que ya existían, que se desaprovechaban, y que con celeridad cambian todo. El miércoles, por ejemplo, se realizó vía internet la primera sesión de un evento de mucha trascendencia institucional, […]
19 de febrero de 2021

Adaptarse: no hay de otra

Juan Ochoa Vidal
juan_ochoa45@hotmail.com
La pandemia vino no solo a hacernos daño, sino también a urgirnos a emplear recursos tecnológicos que ya existían, que se desaprovechaban, y que con celeridad cambian todo. El miércoles, por ejemplo, se realizó vía internet la primera sesión de un evento de mucha trascendencia institucional, que de otra manera hubiese significado una fuerte erogación de presupuesto público, con mismo resultado y quizá ahora hasta mejor en términos de aprendizaje, de asimilación, de avance.

Así, Tabasco es el anfitrión digital del ciclo de intercambio de experiencias denominado “A cien días de la implementación de la reforma laboral”, que concluirá este viernes. Se dice que compartir experiencias en corto, de manera personal, pudiere ser insubstituible; pero también es un hecho que cuando se plantean objetivos de trabajo específicos, los alcances en materia de productividad pueden lograrse con alta eficacia.

El tema, como lo explicó el ex gobernador y hoy presidente del Tribunal Superior de Justicia, Enrique Priego Oropeza, ha sido el siguiente:

Incluso en el contexto de la pandemia, de la lucha personal y colectiva por salir adelante, estamos cerca de cumplir cien días desde aquel 18 de noviembre de 2020, “momento que marcó el andar de la reforma laboral, aquella que emana como resultado de un arduo trabajo y compromiso por parte de nuestras instituciones”.

Se encontraban conectados en videoconferencia, magistrados presidentes de los tribunales superiores de justicia del país, consejeros y jueces de los poderes judiciales. Todos ellos, seguros detrás de una computadora, con la capacidad plena para escuchar e interacturar que da una plataforma digital, recurso que desde hace ya unas dos décadas se utiliza también para cursar diplomados y postgrados, así como experiencias entre científicos, gobernantes, empresarios y también la familia.

En su mensaje inicial, Priego Oropeza recordó que la reforma laboral -diseñada y legislada cuando el mundo no imaginaba enfrentar una situación como la actual- dignifica el derecho del trabajo y fortalece a la clase trabajadora, reconociendo así aquellos factores de la producción, mediante la implementación de sus procesos conciliatorios, ágiles, orales e imparciales.

Hoy -observó- vemos materializada aquella búsqueda de la justicia social, consagrada desde 1917 en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que prepondera la conciliación y reconoce sus cimientos en aquellas reglas procesales claras que responden al llamado de los poderes judiciales, a quienes compete no solo resolver conflictos, sino impartir una justicia pronta y expedita, porque no basta dictar una sentencia: es necesario proteger al indefenso, cobijarle con la certeza de sus derechos y seguir generando la confianza hacia la labor jurisdiccional.

Este ciclo de intercambio de experiencias -añadió- busca que nos retroalimentemos con el trabajo realizado durante estos días, fortaleciendo así al sistema, porque únicamente al destacar las buenas prácticas, compartir ideas y aprendizajes para aquellos casos en que puede resultar compleja la resolución de un asunto, garantizaremos la adecuada impartición de justicia.

La reforma laboral fue publicada el 1 de mayo de 2019 en el Diario Oficial de la Federación. Con ella se da preponderancia a la conciliación. Se basa en reglas procesales claras para cristalizar una justicia pronta y expedita. Hasta esta fecha existe un enorme rezago en juicios laborales, los que se prolongan hasta por diez años, en perjuicio tanto para el asalariado demandante como para el patrón.

La reforma consistió en modificaciones a las leyes Federal del Trabajo, del IMSS y del Infonavit, entre otras. De 569 artículos con cambios, 555 pertenecen a la Ley Federal del Trabajo.

A no dudarlo, más allá de la emergencia sanitaria por la que el mundo atraviesa, hay cambios como este que llegaron para quedarse. Y no solo en la vida de las instituciones, sino también de la ciencia, de la educación. De hecho, el genoma del coronavirus fue compartido por científicos chinos precisamente a través de plataformas digitales, hace ya cerca de un año. Ello permitió el inicio inmediato de los trabajos para la elaboración de las vacunas y la búsqueda de tratamientos.

Del mismo modo, los sistemas educativos de todo el mundo han debido adaptarse y aprovechar el internet, en la medida en que la población tiene acceso a este recurso tan valioso. Y sí: tenemos qué adaptarnos y evolucionar, porque no queda de otra.
Twitter: @JOchoaVidal

Compartir: